Sincronía Invierno 2004 


LA FORMACIÓN DE VALORES EN LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN  COLOMBIANA

Carlos A Botero Chica* 


 

Resumen

 

El presente artículo esta orientado describir el pasado, el presente y las tendencias  de  la formación de valores en la educación superior colombiana. Inicialmente se hace un recuento histórico de las diferentes épocas de la educación colombiana, la cual estuvo influenciada  desde sus comienzos por la religión católica tendencia que permaneció  incólume desde la colonia  hasta finales de 1970. Posteriormente y en especial en las postrimerías del  siglo XX, se presentaron varios acontecimientos que incidieron para que el objetivo de formar valores fuera  perdiendo importancia hasta quedar totalmente relegado, estos sucesos fueron : a) el vertiginoso avance científico y  técnico que se presentó después de los años setenta incidiendo para que nuestros directivos encargados de orientar la políticas de la  educación superior terminaran privilegiando,  la instrucción sobre la educación y b) los fenómenos de narcotráfico, guerrilla y  corrupción que han venido recorriendo nefastamente, el territorio nacional  transformaron el tejido axiológico sobre el cual se cimentaba la sociedad colombiana.           

 

Por fortuna con el advenimiento del siglo XXI,  la formación en: ética, moral y  valores se ha convertido en una recomendación universal emanada desde la UNESCO. En los foros y congresos sobre educación e los ámbitos: internacional, nacional, regional y locales, el tema de formación en valores ha saltado a la palestra y se ha convertido en una tendencia de primera línea. En este sentido, la educación superior colombiana deberá hacer un gran esfuerzo en los próximos años para recuperar la formación integral de estudiante colombiano, deberá por tanto diseñar políticas, establecer programas y trazar tareas que permitan recuperar la urdimbre axiológica, visión explicitada en la parte final de este artículo para que en nuestras facultades y carreras se introduzcan mecanismos que permitan formar ciudadanos integrales esto es:  instruidos y éticos.             

 

ABSTRACT

            

The present article this oriented to describe the past, the present and the tendencies of the formation of values in the colombian superior education.  Initially an historical recount is made of the different times from the Colombian education, which it was influenced from its beginnings by the catholic religion tendency that remained firms from the colony to end of 1970.  Later and in special in the last years of century XX, several events appeared that affected so that the objective to outside form values losing importance until being totally relegated, these events were:  a) The vertiginous scientific and technical advance that appeared after the Seventies affecting so that our directors in charge to orient the policies of the superior education ended up privileging, the instruction on education and b) the phenomenes of drug trafficking, guerrilla and corruption that have come crossing ominously, the national territory transformed the axiológico weave on which the Colombian society laid the foundations itself.

 

Fortunately with the coming of century XXI, the formation in:  ethics, moral and values have become an emanated universal recommendation from UNESCO.  In the forums and congresses on education and the scopes:  international, national, regional and local, the subject of formation in values has jumped to the arena and it has become a tendency of forward edge.  In this sense, the Colombian superior education will have to deliver a great attack in the next years to recover the integral formation of Colombian student. The  Colombian model will must  to design strategies, to establish programs and projects in the universities races that allow to recover the axiológica warp to form integral citizens, this is instructed and ethics.

 

Palabras clave:

 

Axiología: La disciplina que estudia los valores. Etimológicamente esta compuesta por las palabras griegas axos y logos que significan valor y ciencia.    

Ética: Es el saber que permite a los individuos forjar el carácter para tomar decisiones prudentes.    

Moral: Es el conjunto de costumbres, maneras o patrones de conducta que conforman las normas del grupo o de la sociedad en un momento históricamente determinado. Se deriva de la voz latina que significa costumbre.

Valor: Consiste en un conjunto interiorizado de principios nacidos de experiencias analizadas en función de su moralidad. Los valores son algo adquirido hasta el punto de convertirse en hábito, algo adquirido voluntariamente y que acaba siendo objeto de deseo.     


 

1. LA  FORMACION DE VALORES EN LAS DIFERENTES  EPOCAS DE LA HISTORIA DE LA EDUCACIÓN EN COLOMBIA

 

Los historiadores de la educación en Colombia se ha dividido en cinco épocas, así: 1) Colonial, 2) Republicana, 3) Modernidad, 4) Reforma a la modernidad y 5)  Modelo de tecnología educativa. 

 

1.1 La formación de valores en la educación superior en la época de la colonia.

 

Esta época comprende la educación que impartieron los españoles desde la época del descubrimiento 1492 y culminó en 1820 cuando empezaron los movimientos de independencia en América latina frente a la corona española.

 

1.1.1 Orientaciones éticas 

 

En el siglo XV época del descubrimiento, en Europa y especialmente  en España la religión católica se había convertido en una ideología dominante y por ende la educación superior en el Nuevo Reino de Granada en la época de la colonia se encargó de formar individuos dentro de los patrones del dogma católico y de la ideología tomística. [1]

 

En esta época la universidad colonial se orientó a formar a la élite criolla y española en profesiones como el Derecho y el Sacerdocio. A los primeros les enseñaban las normas del  derecho y al clero administrativo se instruía en Ética y Moral, adicionalmente se dictaban materias como: teología, religión e historia sagrada en donde se enfatizaba sobre la formación en valores, tendencia que se mantuvo intacta hasta el año 1820.

 

Los formadores encargados de impartir la educación en valores  que vinieron al Nuevo Reino de Granada fueron  comunidades religiosas tales como: Jesuitas, Franciscanos y  Dominicos.

 

 

1.2 Formación axiológica

 

La enseñanza en valores que predomino en esta época estuvo orientada hacia la obediencia, sumisión, austeridad resignación. 

 

 

1. 2     La formación de valores en la educación superior en la época de la república.

 

Esta época comprende la educación que se impartió en Colombia entre 1820 época de los gritos de la independencia latinoamericana hasta 1840 época en a cual se implantaron los gobiernos republicanos, los cuales instauraron un modelo de  educación  napoleónica.

 

1.21 Orientaciones éticas

 

La formación en valores estuvo orientada a culturizar la población con las ideas provenientes de la Ilustración como movimiento intelectual y cultural que confrontaba el teocentrismo medieval con las ideas de libertad individual, democracia, soberanía popular, pacto social y el racionalismo como fundamento del dominio sobre la naturaleza y los hombres. Este modelo educativo produjo modificaciones en la mentalidad colectiva y por ende en la formación de valores que se impartió en la educación superior hacia  finales del siglo XVIII.

 

Esta formación también estuvo orientada a concientizar a la población universitaria sobre los inconvenientes y dificultades que trajo consigo el poder de la corona española y que finalmente originó la onda insurreccional que recorrió América latina a finales del siglo XVIII.

 

En esta época las comunidades religiosas continuaron representando un rol protagónico en educación. Además, de Franciscanos, dominicos y jesuitas en esta también llegaron monjes capuchinos. Adicionalmente vinieron profesores particulares que provenían especialmente del viejo continente.

 

1.2.2 Formación axiológica

 

Los valores de obediencia y sumisión enseñados en la época de la colonia se transformaron en rebeldía hacia la corona española y fueron reemplazados por los ideales de: libertad, igualdad y  justicia. Estos conceptos se originaron en la revolución francesa y en  la denominada época de la  ilustración, ideales que se instauraron rápidamente en las nacientes repúblicas del continente americano.    

 

1.3      La formación en valores en la educación superior en la época de modernidad.

 

Esta época comprende la educación que se impartió en la época de la segunda mitad del siglo XIX que comenzó en 1840 con la denominada Regeneración y culminó con establecimiento de una educación de modelo liberal  en los años de 1920.

 

 

 

 

 

1.3.1 Orientaciones éticas  

 

Con el surgimiento de la educación superior  Republicana, uno de los objetivos básicos consistió en la formación de buenos ciudadanos, quienes tenían deberes y derechos con el estado. Asignaturas como Cívicas e Instituciones estaban incluidas en las asignaturas de la educación superior y se inspiraron en el modelo borbónico de Carlos IV y el modelo francés Napoleónico.

 

Por esta misma época según el artículo 15 de la Ley 6 de agosto de 1821, el proceso formativo de docentes se inicia en las escuelas normales utilizando el método Lancasteriano. [2] Este método se caracteriza por impartir formación en valores y en enseñar a los futuros maestros Ética y Moral. Uno de los requisitos básicos que se exigía al educador era tener buena moral y conocimiento del método.

                         

La educación en esta época empieza a entenderse como una función pública que  debía cumplir el estado cuyo objetivo era formar las  nuevas generaciones. Los presidentes  que gobernaron en el  siglo XIX como: Pedro Alcántara Herrán, José Hilario López, Aquileo Parra, Rafael Núñez y Mariano Ospina Rodríguez, establecieron políticas de estado alrededor del sistema educativo.

 

No obstante, aunque las ideas de la  ilustración estuvieron presentes en el sector educativo de la época, la enseñanza de la religión católica, permaneció   como un eje rector cuyo objetivo se centró en formar hombres rectos para Colombia a través de la férula y la moral.

 

1.3.2 el modelo de pedagogía católica 

 

A partir de la constitución de 1886 y el concordato de 1887 se estableció en Colombia que la educación debía organizarse de acuerdo con los dogmas y con la moral de la religión católica.[3] La enseñanza de esta religión pasó a ser obligatoria y se confirió a los obispos la potestad de ejercer la suprema vigilancia respecto al cumplimiento de estas normas, así como la supervisión de los docentes y la elección de los textos que habrían de ser utilizados por los educadores. 

 

El Estado se comprometió a defender la religión, y por ello se retornó a las viejas nociones que identificaban al catolicismo con la nación misma; por supuesto esto conduciría al fundamentalismo católico, a ese catolicismo que impedía el disentimiento y la teoría, no solo en las religiosas, sino también en las sociales, políticas y culturales.

 

Al finalizar el siglo XIX, entre 1990 a1920  con surgimiento del la revolución industrial el trabajo ocuparía un preponderante lugar entre los objetivos sociales de las escuelas católicas, la formación de los obreros requeridos por la naciente industria, reclamaba una previa instrucción no solo en las manualidades, sino también en la obediencia y la disciplina. Pedagogizar el cuerpo y el alma: he ahí la intencionalidad de la pedagogía católica.

 

1.3.3 Formación axiológica

 

En síntesis, desde que se inicia el período de formación de la educación colombiana que comienza  en la  colonia en 1580 y que culmina en 1920, para dar paso a la época de la denominada reforma a la modernidad, la formación de valores se enmarcó dentro de un ámbito de: moral, buenas costumbres, obediencia al estado, respeto a la autoridad, civismo, patriotismo, libertad igualdad y justicia privilegiado por una fuerte influencia de la religión católica, a la cual se le ha denominado "modelo de pedagogía católica".

 

Hacen parte de esta formación otros  aspectos disciplinarios y formales: como la puntualidad, la compostura, los gestos y en general los comportamientos del alumno. A través del comportamiento disciplinario se infundieron  valores como el respeto, la formalidad y el trato deferente hacia los mayores y la autoridad.

 

Con el surgimiento de la hacienda cafetera y las pequeñas empresas artesanales emergentes que dieron lugar a la acumulación de capital a finales del siglo XIX aparecen nuevos valores, tales como: el deseo por el  enriquecimiento y la ambición por el dinero, los cuales dieron lugar a prácticas como el contrabando. Aunque estos valores no se enseñaban académicamente se inculcaron extracurricularmente en los senos familiares de los terratenientes, comerciantes  y los dueños de las industrias  nacientes.     

1.4 La formación en valores en la educación superior en la época de reforma a la modernidad. 

 

Esta época comprende la educación que se impartió en la época de la ruptura de lo tradicional, la cual  comenzó en 1920 y culmina en el año de 1960 para dar paso a la denominada tecnología educativa  que surge después de los años sesenta.

 

Las condiciones históricas y fenómenos que influyeron para cambiar el modelo educativo que había venido operando desde el siglo XIX se pueden sintetizar en tres acontecimientos : Con la acumulación de capital de los hacendados colombianos  producto de la venta de materias primas como el café que se realizó a finales del siglo XIX, se consolidaron los terratenientes y algunos de éstos, o comerciantes que giraban en torno del sector agrícola iniciaron procesos productivos conformando una nueva clase empresarial que aprovechó las nuevas  tecnologías  de la revolución industrial. Los terratenientes y nuevos empresarios empezaron a demandar  otro tipo de enseñanza. Cambio que empezó a gestarse después desde 1914  pero que cobró mas fuerza después de 1930.

 

La demanda de una nueva enseñanza estuvo influenciada por la corrientes   pedagógicas, conocidas genéricamente como pedagogía activa o escuela nueva, irrumpen en el territorio colombiano rescatando las propuestas Roussonianas y las de otros ilustres pedagogos internacionales continuadores de Rousseau: Ovidio Decroly (1871 - 1932), Edouard Chaparede (1873-1940) George Kerchensteiner (1854-1932), Adolfo Ferriere (1879-1960), Jhon Dewey (1859-1952) y Maria Montessori (1870-1952), entre otros, quienes se constituyen en algo así cono la primera división de este nuevo proyecto pedagógico, que se propone introducir nuevas metodologías y didácticas, sustentadas en la observación, la experimentación y el papel activo de los estudiantes..

 

Algunos dirigentes liberales entre ellos Don  Agustín Nieto Caballero fundan en Bogotá, el Gimnasio Moderno, en el año de 1914,  la cual estableció en sus aulas, los principios de la "pedagogía activa", razón por la cual, este período de "Reforma a  la modernidad" se ha designado con el nombre de "La escuela nueva".  De alguna manera se trataría de reeditar la pedagogía Roussoniana y Pestalozziana en nuestro medio.  [4]

 

Otro fenómeno que influyó en el cambio de  modelo educativo colombiano y que se conoce como la  reforma a la modernidad fue el movimiento reformista que se inspiró en el "Manifiesto de Córdoba" lanzado por el movimiento estudiantil argentino en aquella ciudad y cuyos fundamentos recorrieron rápidamente varios países  latinoamericanos en el año de 1918.    

 

 

1.4.1 ORIENTACIONES ÉTICAS  

 

El gimnasio moderno se utiliza como el laboratorio en donde se empieza a dar paso a lo moderno. La noción de lo moderno consistió en romper con el pasado, lo tradicional y lo clásico. De ahí que uno de los procedimientos utilizados fue clasificar lo temas y saberes que se consideraba anticuados en esta categoría se catalogaron: la gramática, el pensamiento especulativo, las preocupaciones por la interioridad y la esencia del ser humano, los modelos lógicos del conocimiento, las facultades del alma y la teología.

 

No obstante, en relación con el tema de alma y teología  Caballero para evitar problemas con el clero diocesano continúo con  la enseñanza de la religión católica y desde el punto de vista ético y moral se conservaron los criterios que se habían impartido durante el siglo XIX, o sea que la religión católica continuo reproduciendo un modelo evangelizador. Y es así como, el Gimnasio Moderno terminó  introduciendo  pautas nuevas más desde el punto de vista de la enseñanza de las ciencias, la técnica y las artes.

 

Posteriormente y como consecuencia del surgimiento de la era industrial en Colombia surge una nueva etapa que comienza en el año de 1932 y culmina en el año de 1976. Esta etapa se caracteriza por los cambios estructurales que se dieron en la educación superior colombiana y en los procesos de formación de docentes para la educación superior.

 

En esta etapa se concede al docente un papel relevante y se le asignan   funciones específicas especialmente con el surgimiento de la Escuela Normal Superior colombiana que funcionaría entre 1936 y 1951, la cual además  estaría influenciada por los preceptos de la "pedagogía activa". Entre los principios que fundamentaron la formación ética de los docentes se encuentran los siguientes: formar individuos para la sociedad colombiana que respondan al desarrollo científico, tecnológico social y humano a través de la instrucción de la educación y del desarrollo de habilidades y valores en una dimensión trascendente. Las funciones anteriormente anotadas también fueron asignadas a la escolaridad primaria y secundaria para que la esfera formante contuviera la totalidad del proceso.

 

Las escuelas regentadas por las comunidades religiosas y definidas en torno a los manuales lasallistas, cumplían con las exigencias del régimen político, contribuían a los fortalecimientos de una mentalidad religiosa premoderna y, relativamente, satisfacían también los requerimientos de la modernización económica asumiendo procesos instrumentales que las condiciones de producciones reclamaban. Era necesario calificar y adaptar la fuerza de trabajo a los nuevos procesos productivos del siglo XX y por ende a los intereses del capital. Esta fue la  nueva política que impuso sobre el modelo educativo colombiano.

 

La introducción de un nuevo proyecto pedagógico no seria fácil para la burguesía revolucionaria, sus propuestas chocarían con los obstáculos interpuestos por las concepciones y mentalidades tradicionalistas.

 

 

Esta intención modernizante en la pedagogía coincidiría con una serie de fenómenos, tanto nacionales como internacionales, que vale la pena reseñar: a nivel  internacional la consolidación del capital monopólico, la concentración bancaria y financiera, la exportación de capitales y el reparto del mundo entre las grandes potencias, habría de caracterizar la época del imperialismo y de precipitar las guerras de dominación.

 

En medio de esta ebullición es que se plantea por parte de una élite intelectual de la burguesía, la necesidad de reorganizar la educación, de acuerdo a una orientación pragmática que, confrontando todos los peligros que acechaban, a izquierda y a derecha, pudiese facilitar el acceso al progreso y a la modernización: "El surgimiento de la pedagogía activa en Colombia fue como una isla en medio de un gran mar de pedagogía católica, como la estrategia de esta escuela o colegio nuevo era construir su propia pedagogía, este proceso fue lento y costoso, puesto que luchaba contra un discurso homogéneo, cerrado, dogmático e institucionalizado en practicas cotidianas de la población civil".

 

Como  planteó anteriormente, por iniciativa de Don Agustín Nieto Caballero y otros intelectuales, el Gimnasio Moderno inicia actividades el 18 de marzo de 1815 teniendo como fundamentales aspiraciones educativas, al decir del mismo Agustín Nieto Caballero, que "el buen ciudadano debe representar una fuerza que ayude a levantar el espíritu de la sociedad. Importa pues desarrollar en él la máxima capacidad física, intelectual y moral. Es indispensable prepararlo técnicamente para hacer eficaz su rendimiento... formar un hombre recto y útil - fin primordial de todo intento educativo - será siempre algo mas que dotar a ese ser de un determinado acervo de conocimiento. Sin una idea viril y generosa de la vida, sin disciplinas espirituales, sin voluntad organizada, no puede llegar a conquistar su más alto sentido la función de educar. Así lo entendimos nosotros desde el primer momento".[5]

 

La escuela nueva se propuso a  introducir un nuevo discurso pedagógico basado en la utilización de las ciencias experimentales; en contraposición al verbalismo y la retórica de la enseñanza católica que buscaba homogenizar lo niños mediante el discurso doctrinario y el empleo de la disciplina ferreas. Las pedagogías activas se sustentan en la defensa de la individualidad, el vitalismo y la alegría escolar, por ello lo nuevos métodos enfatizan en el empleo de material didáctico y las actividades lúdicas del niño, sin el acoso permanente de los educadores. El movimiento pedagógico de la Escuela Activa significó un avance en relación con las prácticas autoritarias de la pedagogía tradicional que destacaban exclusivamente el papel omnímodo y vertical de la palabra del maestro. Se trataba de superar el papel asignado al maestro como simple apóstol transmisor de ritualizados conocimientos, para convertirlo en un colaborador y guía del aprendizaje infantil, que le deja amplio espacio para su libertad dándole tratamiento individual para que acceda a los conocimientos a su propio ritmo y por tanto rechazando los criterios de competencia al interior de la escuela.

 

Aunque en un principio la etapa reformista de la educación empezó con fuerza, la recesión económica, y la llegada al poder de Enrique Olaya Herrera, gobierno de corte liberal  en el año de 1930, a causa de la diversidad de intereses terminó negociando con los representantes de la distintas facciones de poder, lo que culminaría con una significativa pérdida en el interés reformista de la educación.

 

Hacia el final de los gobiernos liberales,  la Escuela Normal que se había iniciado en 1936  inicia su declive y finalmente en 1951, bajo el gobierno conservador de Laureano Gómez, será completamente disuelta, luego de un intenso período de cuestionamiento promovido por la reacción conservadora que pretendía justificar su desmantelamiento mediante señalamientos de carácter moral o ideológico; sus prácticas pedagógicas fueron consideradas subversivas y se procedió al bloqueo presupuestal y finalmente a su fraccionamiento y desaparición. De esta manera la promesa del educador formado como verdadero intelectual que desarrolla y aporta en las áreas del saber, quedará aplazada en las instituciones formadoras de docentes siendo reemplazadas en las décadas del 50 al 70, por un enfoque que acentúa el papel transmisionista y la función moralizadora del maestro.

 

Después, la pedagógica activa sería asimilada y acomodada al discurso de la pedagogía católica como un mecanismo adecuado para la consolidación del status quo. Los rezagos de la pedagogía activa se convertirían en pedagogía oficial, como contrapartida de estos proyectos en contraste (activa, autoritaria e histórico - social). Aunque el estado colombiano ha preferido la adopción y extensión del modelo de tecnología educativa como discurso y práctica de la pedagogía oficial, lo cierto es que, a pesar de la publicidad oficial, si se exceptúan unas pocas experiencias realizadas en algunos colegios privados  no existe en Colombia un proyecto público de pedagogía activa, como efectivamente existen en otros países  América Latina.

 

1.4.2 LA  FORMACIÓN AXIOLÓGICA

 

En esta época de la reforma a la modernidad que se inicia el período de 1920 y que culmina 1960, la formación de valores se enmarcó dentro de un ámbito de continuidad del "modelo de pedagogía católica" la cual fomentaba la moral, y las buenas costumbres, y adicionalmente se establecen los cimientos de una sociedad  capitalista que abogan por el individualismo, la libertad, la búsqueda del lucro económico, el  respeto a la autoridad, la superación personal a través de la formación de conocimientos y se conservan valores como: civismo, patriotismo, libertad, igualdad y justicia.

 

No obstante con la consolidación de los gobiernos democráticos y ante la necesidad de hacer pactos y alianzas para conservar el poder se acentúan   antivalores como la corrupción.

 

 

 

 

 

1.5 EL MODELO PEDAGÓGICO DE LA TECNOLOGÍA EDUCATIVA Y EL INICIO DE LA PÉRDIDA DE IMPORTANCIA DE FORMACIÓN EN VALORES

 

Se ha denominado: modelo a  la educación que se impartió desde mediados del siglo y que tomó más auge en 1960, como una imposición por parte de los organismos internacionales. Se sustenta en el conductismo y el taylorismo educativo y su influencia se extiende, con algunas modificaciones, hasta nuestros días.

 

Al finalizar la segunda guerra mundial se inicia en Europa en le año de 1947, el proceso de reconstrucción a través del Plan Marshall cuyo objetivo consistió básicamente  en restaurar las ciudades que habían sido devastadas  por la guerra. No obstante, dicho plan se convirtió en un vehículo para  trazar políticas que evitaran en lo posible el surgimiento de otra nueva guerra pero la  ayuda para la reconstrucción también tuvo  como reciprocidad  penetración política, económica y social. Este tipo de estrategia se convirtió en un paradigma que bajo otros nombres de organismos internacionales como, UNESCO (1942), OEA (1948), CEPAL (1948) difundieron   programas y proyectos para la América Latina patrocinados y direccionados por los Estados Unidos con fines específicos.

 

En Colombia se implantó el modelo desarrollista con fines económicos y la educación no se escapó a las políticas de penetración ideológica. Después de los años cincuenta se  posiciona el modelo pedagógico de la tecnología educativa, cuyos fundamentos estuvieron orientados a privilegiar la instrucción sobre la educación, destacando la ciencia y la tecnología como medio y fin.  

 

1.5.1 Orientaciones éticas del modelo pedagógico de la tecnología y otras alternativas pedagógicas

 

El modelo de educación colombiana después de los años de 1950 tuvo las siguientes orientaciones: a) realzar  la educación confesional, b) promover   y expansionar la educación privada en detrimento de la pública, e c) introducir en los manejos tecnocráticos, gerenciales y empresariales de la educación superior, principios  basados en el modelo norteamericano de educación superior. Estas orientaciones desde los ámbitos educativo y pedagógico se consideraron un retroceso en relación con  los avances conseguidos en el período anterior, entre 1930 a 1945.

 

El célebre argentino Alberto Merani, uno de los sicólogos latinoamericanos mas sobresalientes por  sus aportes  en el campo de la educación ha precisado sobre el modelo pedagógico de la tecnología, lo siguiente: "Antaño el poder se ejercía en nombre de Dios a través de la voluntad de los soberanos; correspondía a los intereses de las castas gobernantes - sacerdotes, militares, y funcionarios. Por consiguiente, el contenido de la educación correspondía a intereses que constituían en última instancia la razón de Estado. Peso desde que la técnica vuela por sobre las fronteras y la producción adquiere carácter internacional, el poder ha pasado sin ni siquiera preocuparse nominalmente por Dios, a manos del capital organizado en corporaciones cuya ideología internacionalista no afinca en terruños, patrias, estados, sino que suplanta al interés inmediato de súbditos por el de consumidores en acto o en potencia que es todo la humanidad". Paulatinamente han venido desapareciendo los poderes autónomos nacionales que se han convertido en agentes locales del dominio abstracto del capital y del mercado.[6]

 

Cada vez más somos manipulados  por el círculo infernal de la producción y el consumismo, los cuales responden a los intereses del capital y se sustentan en los reiterados  mitos del desarrollo y el progreso.

 

Los modelos de planeación y las estrategias de desarrollo para la América Latina, comenzaron a afluir conjuntamente con las versiones extranjeras para el funcionamiento de algunos renglones de la economía, y por consiguiente con la deuda externa. Se inició así un modelo de sustitución de importaciones.

 

A tono con estos procesos se introdujeron en América Latina, una serie de programas de adecuación del aparato educativo bajo condiciones impuestas por los organismos financieros internacionales con el fin de alcanzar los objetivos diseñados en los centros de poder internacionales, particularmente de los Estados Unidos. De esta forma inicialmente, la tecnología educativa y el diseño instruccional, ingresarían a Colombia, y  posteriormente se introducirían nuevas propuestas instruccionistas como la teoría del capital humano, aún en boga en nuestro medio educativo.

 

La tecnología educativa como corriente pedagógica, tiene una larga historia: en torno al compromiso humano, para explicar esta responsabilidad han surgido varias teorías como: el instintivismo o biologismo, el ambientalismo o conductismo y la teoría psicoanalítica, entre otras.  Erich From, al analizar estas opciones teóricas ha expresado: "el hombre de los instintivistas vive en el pasado de la especie, y el de los conductistas vive el presente de su sistema social, el primero es una máquina que solo puede producir pautas heredadas del pasado; el segundo es una máquina que solo puede producir las normas sociales del presente. Instintivismo y conductismo tienen en común una premisa básica: que el hombre no tiene psique con estructura y leyes propias".

 

El conductismo es una teoría basada en el positivismo, que tiene la pretensión de alcanzar un conocimiento "objetivo" de la ciencia humana, rechazando lo "juicios de valor", como los sentimientos y las pasiones. Teóricos norteamericanos, Watson y Skinner entre otros se comprometieron en construir una especie de técnica del comportamiento o de ingeniería conductual, que permitiera alcanzar las conductas deseadas partiendo de los condicionamientos que ya Pavlov había estudiado. Así, tanto los animales como los seres humanos pueden ser condicionados para que actúen de determinada manera, según el deseo y la manipulación ejercida por el experimentador.

 

Para Skinner la conducta estaría determinada exclusivamente por los componentes genéticos y los refuerzos positivos (no aversivos) que se apliquen a los individuos. Siguiendo el estudio crítico que Noam Chomshy hizo a las teorías de Skinner, entendemos que su preocupación consistía en buscar las posibilidades de una planificación de la cultura para alcanzar la felicidad, "hacer de la vida algo menos punitivo y, al conseguirlo, liberar energías y tiempo para actividades mas estimulantes, mientras ahora se consumen en un esfuerzo inútil por evitar el castigo".

 

La planificación de cultura, según Skinner, se puede lograr mediante un sistemático control de la población, "el control de la población en su conjunto es cuestión que hay que dejar en manos de especialistas-policía, sacerdotes, propietarios, maestros, terapeutas con sus reforzadores igualmente especializados y sus contingencias codificadas".

 

Para esta particular concepción de la "felicidad" de los seres humanos, el interés por las nociones "metafísicas" como la libertad y la dignidad, debería ser eliminado, ya que la ciencia de la conducta las hace absolutamente innecesarias.  La propuesta del hombre autónomo que preconizara la ilustración, inexorablemente queda reducida a un sueño irrealizable.

 

Esta coherente teoría, que además podía demostrar que la conducta puede ser controlada, pero que olvida el espíritu, la praxis vital y la interacción comunicativa de los hombres, evidentemente alcanzó un gran prestigio en el puritano medio intelectual y social norteamericano, porque logra fundir elementos de los  pensamientos tradicional, optimista y liberal, con la liberal realidad social y mental de la sociedad cibernética.

 

Las sociedades establecidas en torno a los valores e intereses del modo de producción capitalista, son hostiles al desarrollo libre de la autonomía y la individualidad, su proyecto estriba en la institucionalización de la subalternidad y en la promoción de los intereses compensatorios, sustitutivos de los emancipatorios.

 

La estrategia, entonces, consistiría en modernizar la educación, introduciendo nuevos criterios de "calidad educativa", que permitieran la incorporación del conductismo y la tecnología educativa. Propuesta y diseños que explotarían hacia los pueblos periféricos y dependientes.

 

Aunque la tecnología educativa comienza a recomendarse a los gobiernos del llamado tercer mundo, desde finales de la década del 50, en América Latina y particularmente en Colombia, su auge  corresponde a los años 60 y 70.[7]  Por estos años  se introdujo en Colombia la televisión educativa con programas conductuales como Plaza Sésamo y se organizan nuevos sistemas escolares e instituciones educativas de instrucción programada y controlada para una capacitación técnica media, como el SENA y los INEM, con currículos diseñados por tecnólogos para ser aplicados por cualquier docente; serían los denominados "currículos a prueba de maestros".

 

Presiones y exigencias populares, particularmente por el acceso a la educación, que llevaron a la administración del Estado en el gobierno de Carlos Lleras Restrepo, a responder mediante la masificación de la enseñanza primaria y secundaria, expresada en la instauración de las dobles y hasta  triples jornadas escolares en un solo establecimiento, lo que contribuiría, a la postre, al deterioro de la calidad de la educación. Paralelamente se establecería el modelo desarrollista de universidad, a partir de un "diseño teórico - ideológico del Plan Básico de Educación Superior" y de un conjunto de normas e instituciones destinadas a reformular el papel de la educación, conforme a los intereses del capital transnacional (instituciones como el ICFES, el ICETEX y COLCIENCIAS, surgen a partir de estas "recomendaciones").

 

Los programas curriculares de las universidades y la  programación educativa, fueron establecidos por los asesores de las misiones norteamericanas, la denominada banca mundial y las agencias y fundaciones transnacionales, que recomendarían los procesos de privatización, la estructura tecnocrática y empresarial del sistema educativo, con la consiguiente búsqueda de la eficiencia, el rendimiento y la rentabilidad, el establecimiento de propósitos meramente profesionalitas y pragmáticos y la imposición de una dirección autoritaria  para las universidades públicas.

 

La puesta en marcha de estas adecuaciones o "reformas", condicionaban los empréstitos por parte d entidades financieras internacionales como el Banco mundial, el Banco Interamericano de Reconstrucción y Fomento - BIRF -, el Fondo Monetario Internacional para el desarrollo - AID -, el fondo monetario internacional - FMI -, el banco Interamericano de Desarrollo - BID - y de fundaciones que decían prestar ayuda, como la Ford, la Rockefeller, la Kellog y otras.

 

La educación empieza a ser pensada como si se tratase de un proceso productivo, en donde los objetivos deben ser medibles y controlables, para obtener precisamente la eficacia, el rendimiento y la rentabilidad. El diseño industrial y productivo, se convierte en diseño instruccional. El profesor Carlos Augusto Hernández anota: "lo que hay detrás de estos esfuerzos de tecnificación del proceso educativo no es precisamente un criterio de científicidad, sino un interés de control técnico de la actividad humana".

 

Mediante la imposición del diseño instruccional, que define y limita toda eficacia educativa al cumplimiento de algunas fases consideradas indispensables para el llamado proceso de enseñanza-aprendizaje, como la fijación de objetivos específicos. Simultáneamente al diseño instruccional se confirió a los obispos la potestad de ejercer la suprema vigilancia respecto al cumplimiento de estas normas, así como la función de   defender la religión, y por ello se retornó a las viejas nociones que identificaban al catolicismo con la nación misma.

 

Desde el año de 1911 y hasta los años de 1950 se utilizó el modelo de Henry Ford , quién busco controlar la producción y alcanzar un máximo de eficiencia en su fábrica de automotores. Para lograrlo optó por separar las tareas que realizaban los obreros, sistematizándolas de tal manera que cada un de ellos tuviese control exclusivamente sobre la totalidad del proceso; así cuando las tares complejas se separan de las tareas simples, cualquier obrero puede ser substituido por otro: los obreros expertos pueden ser sustituidos por obreros no calificado y estaremos en posesión de algo así como un currículo a prueba de obreros.

 

La principal característica del taylorismo es la separación entre quienes piensan y quienes ejecutan; se trata de ver al ser humano como un instrumento del capital. Este sistema afectó en gran parte la salud mental de los trabajadores, el sistema de producción en cadena de los grandes centros industriales atraía a granjeros jóvenes quienes después de laborar durante cuatro o cinco años bajo el sistema de trabajo en cadena terminaban con los nervios deshechos.

 

La situación descrita, trasladada a la educación, significa, por supuesto, la pérdida de la capacidad de crítica, de la autonomía intelectual de los educadores y la imposición de un sistema educativo dual, en el cual algunas instituciones, de manera restringida se dedican a formar la élite de los directivo o gerentes, mientras que otras situaciones, con gran amplitud de matricula se encargan de la calificación de la fuerza de trabajo, para el uso de nuevas tecnologías, para la competitividad y para la mas generalizaba promoción de los intereses compensatorios, suplantadores de los ideales emancipatorios, o siquiera reformistas, que pudiesen tener las masas de trabajadores.

 

Substituidos el maestro de la dirección de las prácticas pedagógicas y despojado de su liderazgo intelectual, se impuso tanto en el mundo universitario como en la educación básica, la dictadura tecnocrática. Dirigida  por los grupos anónimos y abstractos que establecen los diseños curriculares y que deciden administrativamente, el que hacer pedagógico y educativo de los países periféricos y dependientes, no conforme a los intereses regionales o nacionales, sino ajustándose a las demandas e indicaciones del capital transnacional.

 

Después de los años  de 1980 han  surgido  otras alternativas de modelos pedagógicas  sujetas a variados y hasta fugaces paradigmas socio-educativos  subordinadas al dominio abstracto del capital y del mercado. Paralelamente y como expresión contrahegemónica a estas propuestas surgidas de los centros de poder, desde los países periféricos, particularmente desde la América Latina, han aparecido algunas opciones pedagógicas y educativas que expresan posturas reformistas y hasta radicales. Pero en síntesis, al finalizar el siglo XX imperó un afán de privilegiar lo instructivo sobre lo educativo dando paso a unos estudiantes con amplios conocimientos técnicos y escasa educación ética. [8]

 

1.5.2 La formación axiológica

 

 El afán de privilegiar la instrucción sobre la educación favoreció la expansión de la de la crisis de valores y terminó por aniquilar cualquier intento de formar ética y valores en la educación superior colombiana. Las asignaturas de humanidades fueron relegadas y en algunos casos figuraban en los currículo mas como un requisito que como una necesidad.

 

Otro elemento que ha contribuido a la transformación de  valores es el cambio de actitud en la formación disciplinaria de los alumnos. Mientras que antes  de los años ochenta se exigía a los estudiantes  una disciplina  férrea, actualmente entre las nuevas  alternativas pedagógicas surgidas entre 1980 y 2004 existe el consenso de no utilizar métodos  coactivos. El control no punitivo de la sociedad, la ampliación de los mercados y el consumismo y en fin, el dominio abstracto del capital, constituyen los elementos básicos de las nuevas ofertas educativas que  se vienen difundiendo hacia e mundo entero, desde los centros de poder.

 

Entre los antivalores que ha generado la formación permisiva y laxa resaltan los siguientes: consumismo, dependencia del dinero,  ambición, corrupción, vida fácil, intolerancia, falta de respeto por la vida ajena, despilfarro de los recursos naturales.  

 

1.61 Las orientaciones éticas

 

Del ideal surgido en la conformación de los estados nacionales en el siglo XIX que buscaba la formación del ciudadano definido desde su participación activa en la vida política de la nación dentro de un gran proyecto de civilidad, presenciamos ahora un cambio en la óptica, que si bien no excluye la noción de ciudadano, la desplaza, colocando como fin social de la educación la formación del hombre como individuo productivo. Se trata de formar individuos  que hacen parte el engranaje económico como pieza fundamental del mismo. De esta forma se contrapone la utopía de alcanzar una educación ilustrada humanista, religiosa y liberal de siglos anteriores, con la instauración de un modelo educativo orientado la instrucción, capacitación y adiestramiento general de la población para la producción y el consumo, primando así  unos objetivos claramente económicos. Comienza así el derrumbe de lo ético y se posiciona  la crisis de valores.

 

Uno de los principios básicos, común a las otras alternativas pedagógicas es la supresión del autoritarismo en las relaciones alumno profesor, pero la escuela no es un lugar aparte y, como lo devela Alberto Merani[9]: desde la revolución Industrial hasta hoy la suerte de la educación quedó sellada por el progreso continuado de la didáctica. Las escuelas son cada día mejores, mas cómodas, los métodos de enseñanza revelan facetas de una sutileza increíble, la vida de la escuela esta integrada con la vida del hogar, y los padres tienen voz y voto en la gestión del maestro. Más aún, las nuevas pedagogías no-directivas crean un ambiente cálido, acolchado para los educandos, a los que insensiblemente introducen en una realidad que no es la suya y hacen vivir al niño en el limbo de un mundo que sin duda promete la felicidad, pero que en fin de cuentas es una falsa excrecencia de la realidad que sirve para edulcorar ilusiones paternas. Con este texto Merani desea explicar que si bien es cierto, la imposición, y el autoritarismo didáctico fue superado por los profesores, la mayoría de las premisas y principios de las teorías científicos, técnicos, culturales y artísticas se imponen desde los centros hegemónicos y están articuladas a la racionalidad del capitalismo, representando así otro tipo de imposición .    

 

Desde los mismos países de centro se presentan variadas teorías y concepciones respecto a la educación y la pedagogía, países periféricos como Colombia  han venido aceptando, no siempre de manera uniforme, las diversas teorías que legitiman el orden establecido internacionalmente, periódicamente aparecen tendencias de reafirmación tercermundista que confrontan y/o complementan las tesis emanadas de las metrópolis y de los actuales centros de excelencia o multinacionales del conocimiento: conformándose una especie de competencia internacional por imponer sus presupuestos epistemológicos y alcanzar así mayores grados de ascendencias y de legitimación posibles.

 

2. ANTIVALORES Y CRISIS DE VALORES

 

Las dos  últimas décadas de la historia colombiana se ha caracterizado por una crisis de valores. Como se ha explicado anteriormente son varias las causas que la han originado. No obstante, el hecho incontrovertible y contundente se explica en parte por  rol que ha jugado la academia. Los resultados que ha generado la crisis de valores se expresan a diario en la sociedad Colombia. Como un aporte al tema que se ha venido tratando se han seleccionado cuatro contradicciones básicas que permiten evidenciar claramente la crisis de valores: a) Entre educación versus instrucción que forma individuos que pierden el sentido de servicio social o bien común. b) Entre bienestar y calidad de vida versus consumismo. c) Paz y justicia versus conflicto armado d) honestidad y transparencia versus corrupción y vida fácil             

 

2.1 La primera contradicción: entre educación versus instrucción que forma individuos que pierden el sentido de servicio social o bien común

 

Cuando el individuo solo se forma en destrezas y habilidades termina orientando el producto de  su trabajo hacia el lucro personal individual y pierde el contexto de colectividad y bien común.

 

Los productos de su trabajo terminan por proponer alternativas y soluciones orientadas a la solución de problemas de las élites o de algunos reducidos grupos sociales perdiendo el sentido de colectividad, solidaridad y bien común. 

 

En Colombia muchos técnicos y profesionales terminan prestando sus servicios al narcotráfico, la guerrilla o los paramilitares. Se convierten en sus asesores económicos y financieros, son expertos en hacer inversiones clandestinas, en administrar empresas fachadas para lavar dinero procedente de operaciones ilícitas, en traspasar en forma indiscriminada bienes a testaferros y terceros, y en evadir impuestos.  

 

Formar en valores es fundamental para que los técnicos y profesionales de diferentes áreas y disciplinas tengan capacidad de servir a la sociedad, lo cual se logra cuando además de formación en destrezas y habilidades adquieren una sólida formación ética y moral. Esta formación inculca en el individuo un sentido de servicio hacia los demás y hacia la sociedad.

 

Con la combinación de una formación en: destrezas, habilidades, ética y moral, el individuo propone alternativas realizables de utilidad para el bien común y la sociedad. La formación integral permite a los técnicos proponer proyectos que existen en otras sociedades mas solidarias que la colombiana, tales como: una banca de los pobres, una tasa de interés baja para la circulación de capitales financieros, una renta básica de ciudadanía, instituciones internacionales de justicia, mecanismos de comercio justo, fondos éticos de inversión, fondos solidarios, investigación con células madre, “recolocación” de los expulsados de las empresas y control de la investigación biotecnológica en países en vías de desarrollo.

 

 

2.2 La segunda contradicción: entre bienestar y calidad de vida versus consumismo.

 

El consumismo aparece a primera vista como un comportamiento social masificado, sello distintivo de las llamadas sociedades de consumo. El consumo, en tanto función económica, se ha convertido en nuestro tiempo en una función simbólica.

 

La sociedad del consumo se afianza en Norteamérica como un fenómeno intrínseco a su desarrollo histórico – económico en los albores del siglo XX; y en  Europa, la sociedad de consumo se consolida como diseño socio – cultural tras la derrota del nacional socialismo alemán y del fascismo italiano.

 

En América Latina la revolución capitalista, surge de un modo traumático con las dictaduras militares que desplazan a los proyectos populistas o desarrollistas de la década de los sesenta. En este sentido, se podría afirmar que en nuestro continente se instalan, bajo la tutela del FMI, sociedades de consumo de tercera generación; esto es, sociedades de consumo nacidas más de estrategias globales de orden mundial que de variables histórico – políticas intrínsecas. En pocas palabras: el neocapitalismo latinoamericano representa el nuevo orden para la región.

 

Desde otro punto de vista, no podemos dejar de observar que el consumismo es un nuevo orden cultural,[10] en que las necesidades impuestas por un orden económico devienen impulsos o deseos. Se trata más bien de postular un perfil socio-genético del individuo y de la cultura. Esta nueva forma se manifestada en un neo – narcisismo  resulta ser la impronta de una época. Si admitimos el consumismo como diseño socio – cultural en toda su radicalidad, podríamos hacerlo análogo a forma de vida, a modo de ser.

 

El modelo neoliberal, los medios y en especial la a televisión es el espacio virtual; donde se enuncian y legitiman esta nueva forma de ser. Los transmisores de este saber narrativo son los medios masivos de comunicación y la publicidad; obviamente, el medio preponderante es la televisión.

 

Las jugadas son ahora, verbo – icónicas. Estos héroes de nuevo cuño encarnan los micro – relatos que orientan la vida de generaciones enteras. Bajo la lógica de la moda, esto es, bajo la lógica de la seducción, de lo efímero y de la diferenciación marginal ¿Qué relatan estas imágenes? La respuesta más amplia que podríamos concebir es: formas de vida. Esto implica, por cierto, un sin número de características: desde el vestuario y la apariencia física hasta las cualidades morales del ídolo. Esta diversidad de rasgos, no puede ocultar algunas constantes dignas de destacarse: juventud, éxito, individualidad.

 

En efecto, estamos ante arquetipos de la juventud (higiene, salud, vitalidad, acción, alegría, espontaneidad); al mismo tiempo, detrás de una sonrisa ebúrnea, descubrimos una cierta noción de éxito: un automóvil deportivo, una pareja deseable, viajes y muchos dólares. Todo esto nos lleva a la exaltación de un principio sagrado: el individuo.

 

Esta sociedad de consumo; crea una ruptura de los valores, y privilegia la noción de placer, como polo de toda consideración ética. Este nuevo estadio ético postmoderno, ha sido llamado la postmoral y, sin duda, constituye uno de los aspectos más paradójicos de la cultura contemporánea. El debilitamiento o la extinción de las grandes narraciones, así como de los sentidos trascendentes en la vida de los sujetos; no significa esto, la desaparición de un marco valorico ni la anulación de los lazos sociales.

 

Sociedades como la colombiana muy permeables a esta forma de vida, pues sus estructuras políticas y tecno – económicas la ponen en relación con la corriente principal del capitalismo internacional. Esta permeabilidad cultural es relativamente independiente de las características infraestructurales de la sociedad; de hecho, lo nuevo consiste, justamente, en que la mutación es subjetiva y pragmática.

 

El consumismo apela a este mundo sin clases, remitiendo al individuo a la búsqueda de su diferencia específica; en el abismo inconmensurable de la subjetividad. En una sociedad de consumo, como la colombiana, el individuo es arrojado a un espacio en que su identidad es una forma de vida, esto es: un microrrelato cultural, que se traduce en un pseudo – estilo de vida, análogo a la moda. Lejos de ser un mero avatar económico; el consumismo es un poderoso vector cultural que está transformando todos los dominios del que hacer humano.

 

El consumismo en Colombia se expresa: en el derroche de los recursos naturales, en un afán por la estética convirtiendo a las jóvenes  en personas  bulímicas, famélicas y anoréxicas  atentando contra la su salud, una televisión enviando mensajes equivocados a través de realities imponiendo la competencia e impulsando a la juventud a coger fila eternas para ser escogidos en programas televisivos en donde los concursantes ya están seleccionados de antemano. Un afán desmedido por  adquirir bienes materiales  obedeciendo a las distorsiones que introduce en el  mercado  la publicidad  y la globalización. En general los medios se han vendido al becerro de oro y envían mensajes equivocados sobre la forma de vivir.     

 

La formación de  valores como: la austeridad,  independencia entendida como calidad de vida sin ambición, conservación del medio ambiente, igualdad sin competencia, aspirar a lo necesario si excesos, enseñar a ser mas que a tener, todos tenemos derechos fundamentales, las oportunidades y los talentos no dependen de la belleza. Estos son  mensajes necesarios  para cambiar el discurso axiológico que manejamos hoy.

 

2.3 La tercera contradicción Paz y justicia versus conflicto armado

 

A continuación se relata brevemente una historia de la violencia en Colombia desde 1948 a 2004.[11]

 

La violencia en Colombia es un problema antiguo pero según los estudiosos se recrudeció desde el año de 1948 con la muerte de Jorge Eliécer Gaitán, forma sintética se presenta un resumen de los principales hechos.

 

Esto daba lugar a la abstinencia del partido Liberal en las elecciones presidenciales de 1950, las cuales habría de ganar, sin oposición, el candidato conservador Laureano Gómez. El régimen de Gómez, a caótica violencia dio lugar al enfrentamiento rural entre los sectores Liberales y Conservadores. También dio lugar a luchas entre la oligarquía y los campesinos sin tierra que tendrían como resultado el abandono de sus tierras por parte de los latifundistas para refugiarse en la relativa seguridad de las ciudades.

 

En 1953 Gómez era derrocado en un golpe militar que llevaría al poder al General Gustavo Rojas Pinilla. Rojas Pinilla enviaba a los militares a recuperar las propiedades abandonadas por los latifundistas en su huida a las ciudades.

 

Entre 1953 y 1960 Los campesinos, que se vieron forzados a adentrarse en la selva, se dieron cuenta de que la única oportunidad de lograr la justicia social residía en su capacidad para librar una guerra contra el gobierno a nivel nacional.

 

El 20 de julio de 1964, los diversos frentes de los movimientos de autodefensa armados establecían su propio programa de reforma agraria. Dos años después se convertían oficialmente en las FARC.

 

El segundo grupo guerrillero del país, de inspiración cubana, el Ejército de Liberación Nacional (ELN), surgió en 1964 en el departamento de Santander, de la mano de estudiantes universitarios recién retornados de Cuba. El ELN se adhirió estrictamente a los principios del Che en cuanto a la lucha de guerrillas rural. En 1972 con el triunfo “fraudulento” de las derrota del candidato del Frente Nacional, surge la creación del movimiento guerrillero M-19.

Cuando empezó el auge de la coca a finales de 1970, la fascinación por los beneficios de la droga diera como resultado una masiva ola de inmigración de desempleados urbanos y campesinos sin tierra hacia las regiones predominantemente controladas por las FARC.

En 1977 surgen los grupos paramilitares como respuesta de los jefes de los cárteles de la droga de Medellín y de Cali quines empezaron a invertir sus nuevas ganancias en propiedades, principalmente enormes fincas ganaderas. Los nuevos narco-terratenientes se pusieron de inmediato a organizar sus propias fuerzas paramilitares para combatir a las guerrillas y a diversos otros grupos considerados simpatizantes de las guerrillas.

 

En 1981 como respuesta la esta estrategia de la guerrilla, 223 traficantes de droga en Cali organizaban el grupo paramilitar llamado Muerte a Secuestradores (MAS).

 

Con el surgimiento de la Unión Patriótica y ante la proliferación de estos grupos de izquierda se firma una tregua pactada por las FARC y el Presidente Belisario Betancur en enero de 1983. Catorce meses después se firmaban los acuerdos de La Uribe y el Sociólogo Ricardo Vargas Meza afirmaba: mediante la incorporación de algunas de las reivindicaciones socioeconómicas de las FARC y la consolidación de la tregua, los acuerdos abren la posibilidad de una resolución política del conflicto.

 

En 1986 con la ayuda del recién elegido presidente Virgilio Barco en no se tardo en poner punto final a cualquier negociación que pusiera en juego los intereses de la oligarquía. Entre 1986 1990 se intensificaron los ataques paramilitares, según estadísticas hubo un drástico incremento en el número de asesinatos políticos, de 1.053 en la década de 1970 a 12.859 en la década de 1980, incluidas 108 masacres sólo en 1988.

 

La función de los paramilitares quedó aún más legitimada el 13 de diciembre de 1994, cuando se lanzó un nuevo programa bajo el título de CONVIVIR, mediante el cual se autorizó a la población civil al establecimiento de "cooperativas rurales de seguridad" con la clara intención de crear tropas de inteligencia en sus regiones.

 

En noviembre de 1998, el presidente Andrés Pastrana procedió a la retirada de 2,000 soldados y policías de un área de 16.200 millas cuadradas en el sur de Colombia como paso previo a las inminentes conversaciones para poder dar inicio a los denominados diálogos de paz con las FARC.

 

En el 2002 con la llegada al poder del presidente Álvaro Uribe Vélez se congelaron los diálogos de paz y se comenzó una lucha franca contra los grupos guerrilleros bajo el programa denominado Seguridad Democrática. En esta lucha Uribe se ha asociado con los Estados Unidos, los diálogos de paz se encuentran suspendidos y los principales lideres guerrilleros que tienen procesos de detención y extradición porque han sido declarados como narcotraficantes. Después de los atentados de las Torres Gemelas de New York del 11 de septiembre en 2002, los grupos guerrilleros han sido declarados como terroristas y tienen órdenes de captura.

 

El año 2004 esta comenzando y el gobierno con su programa “seguridad democrática” esta dispuesto a continuar enfrentando la guerrilla y ha cancelado los diálogos de paz, para continuarlos le ha  puesto la condición a la guerrilla del cese al fuego y de hostilidades a la población civil.     

 

Este breve recuento nos permite evidenciar que existe un agudo conflicto armado que intrínsecamente que ha estado signado por la  violencia. El mensaje consiste en continuar promoviendo una salida al conflicto con base en un dialogo, con una actitud negociadora para que tenga una salida  lo menos cruenta posible. La academia juega un rol importante, los valores como tolerancia, paz, solidaridad y trabajo en equipo cobran un significado crucial en la formación de nuestros jóvenes        

 

2.4 La cuarta contradicción honestidad y transparencia versus corrupción y vida fácil

 

Otro problema crítico que se vive en Colombia y en especial en la ciudad de Medellín es el fenómeno de la corrupción. Los estudiosos del tema originan la corrupción en la denominada teoría de la alienación que en síntesis se explica en la forma siguiente: para el caso colombiano se ha tomado el concepto de alienación desde el punto de vista del Sociológico Melvin Seeman quien habla de cinco variantes de alienación y dos de estas parecen tener aplicabilidad particular a la situación en Colombia: impotencia y autoalejamiento. 

 

Categoría 1, impotencia – la esperanza o probabilidad sostenida por el individuo que sus propias acciones no puede determinar la ocurrencia de los resultados o esfuerzos que él busca. Note la última encuesta sobre actitudes en Colombia: 32

 

"Hablando en general, ¿cree Ud. que las cosas en este país van en un camino bueno o malo?

 

·         Buen camino, 19 por ciento.

·         Mal camino, 78 por ciento.

·         Sin respuesta, 3 por ciento.

 

Estos resultados muestran la desilusión y desesperanza que por supuesto conduce al sentido de alineación

 

En los años noventa en Colombia han asesinado un ministro de Estado, un Procurador General de la Nación, cuatro candidatos presidenciales, 1.500 dirigentes de la Unión Patriótica, casi un millar de policías y medio centenar de periodistas, habían pagado con su vida el defender el ideal de un triunfo sobre la mafia.

 

La categoría número uno es indudablemente una alienación importante y puede explicar una racionalización generalizada que "si todo el mundo lo hace y a nadie se le castiga, ¿porque no hacerlo yo si paga bien?"

 

Categoría 2, autoalejamiento – la pérdida de significado intrínseco u orgullo en el trabajo actual para que los individuos funcionen solamente para la remuneración anticipada.

 

En la década de los sesenta cuando el crecimiento del producto interno bruto tenia tasas del 5 a 7%, las tasas del desempleo eran de un digito, el narcotráfico, ni el paramilitarismo habían hecho aparición en el escenario nacional, el ciudadano del común tenia la convicción que el liderazgo político estaba cambiando, las fuerzas armadas se estaban reformando, pero fundamentalmente era el pueblo colombiano mismo el que se estaba transformando.

 

Al moverse el escenario al año 1.999, los resultados del país con un crecimiento del PIB del 2%, un desempleo del 18%, una guerrilla con cerca del 30.000 hombres, unos homicidios que alcanzan las 26.000 muertes, un paramilitarismo que viola alevemente los elementales derechos humanos y un cartel de la droga que genera 8.000 millones dólares al año, empieza a generar en la población  una sentimiento de autoalejamiento esto se manifiesta por el deseo que sienten los colombianos de buscar trabajo y salir del país para mejorar sus condiciones de vida.

 

La importancia de un entendimiento sociológico de la alienación es que compromete al investigador a buscar no fuentes de ansiedad individuales, sino sentimientos de impotencia colectiva enfrentando el fenómeno social particular como la corrupción y la violencia. Nunca asume que toda la sociedad está alienada, al igual que no todos son corruptos. De hecho, tal aproximación se impone la tarea empírica fundamental de explicar porqué, dentro del mismo contexto social, algunos son alienados y otros no; algunos son corruptos pero no la mayoría.

 

Los expertos dedicados al estudio de este problema analizan los altos costos sociales que trae consigo el problema de la corrupción con cuatro consecuencias.[12] Primero, la corrupción destruye la eficiencia del estado, gastando sus recursos y debilitando sus acciones contra la mala administración. Tal corrupción puede llegar a amenazar la salud pública: por ejemplo, la construcción de mala calidad, el uso de medicinas anticuadas o contaminadas, o la desviación de comidas de orfanatos a otros usos – todos estos han ocurrido recientemente en Colombia.

 

Segundo, la corrupción engendra una distorsión absurda en la distribución de ingresos, enriqueciendo a los ricos y empobreciendo a los pobres. Los pobres se hacen más pobres, por ejemplo, cuando proyectos públicos no se completan o se completan en calidad inferior como resultado de la corrupción.

 

Tercero, el incentivo de la corrupción esta en contra al desarrollo de la sociedad; crean la insidiosa idea que es más fácil hacerse rico trabajando para el estado que creando un negocio privado productivo. Esta idea milita en contra de la creación de nuevos empleos. La mitad de las posiciones administrativas de cierto rango son ocupadas por personas nombradas por jefes políticos, no por burócratas profesionales.

 

Cuarto, la corrupción incurre costos políticos serios: la inmoralidad, cinismo, inestabilidad institucional, y la legitimación de la rebelión armada contra el estado. El problema más serio para Colombia es la falta de legitimidad entre el pueblo. Este problema tiene su raíz en la corrupción generalizada y es ilusorio pensar que una reforma constitucional puede resolverlo.

 

Frente a esta contradicción es importante inculcar en nuestro jóvenes valores como: honestidad, transparencia, rectitud y que los bienes solo se consiguen con un trabajo diario y honrado.  

 

3. LA TENDENCIAS DE FORMACIÓN DE VALORES A PRINCIPIOS DEL  SIGLO XXI

 

3.1             La educación con formación integradora es una tendencia actual[13].  La educación con visión integradora enfatiza en la necesidad de impartir la formación de valores en la educación de hoy. Al respecto se dice lo siguiente:

·         Una formación integral es entonces aquella que contribuye a enriquecer el proceso de socialización del estudiante, que afina su sensibilidad mediante el desarrollo de sus facultades intelectuales, artísticas, que contribuye a su desarrollo moral y que abre su espíritu al pensamiento critico y al cultivo de una forma de vida en sociedad movilizada por valores de justicia y solidaridad sin los cuales no es viable la vida la vida en sociedad.

·         La universidad ha de contribuir tanto a preservar el legado de las generaciones precedentes coma forjar el porvenir. La cultura y la naturaleza lo mismo que las formas intangibles de patrimonio -tradiciones ritos, fiestas y costumbres -; pero también el patrimonio genético y, sobre todo, el patrimonio ético. Este último adquiere mayor relevancia porque los valores que dejemos alas generaciones venideras determinaran la arquitectura del mundo de mañana. Esta exigencia de conservar el legado del pasado y aumentarlo es una de las formas de inventar, de reinventar de construir cada día el futuro.

·         Enseñar la condición humana. Es fundamental que las instituciones que brindan el servicio educativo se esfuercen por presentar una visión integrada del fenómeno humano. Integración que debe ofrecerse articulando las disciplinas que estudian lo humano, evitando toda desintegración de los saberes que ofrezca la falsa apariencia de una desarticulación del se humano.

·         Enseñar la ética del género humano. Es urgente para el siglo que comienza.

·         Establecer una relación de control mutuo entre la sociedad y los individuos, por medio de la democracia y asumir la humanidad como comunidad planetaria. La educación debe no solo contribuir a una toma de conciencia de nuestra tierra patria, sino también, permitir que esta conciencia se traduzca en una voluntad de ejercer la ciudadanía terrenal.

·         En el terreno de las competencia por desarrollar, además de las que ya mencionamos, se han hecho sugerencias en el marco de la movilización, algunas de las cuales tienen particular relevancia: apropiación critica de conocimientos transdisciplinarios; desarrollar habilidades y destrezas para moverse profesionalmente en el mundo altamente competitivo, desarrollar una ética personal basada  en principios mínimos de comunicación y cohesión social, desarrollar la sensibilidad estética y la capacidad para comprometerse  con los valores que hacen viable la vida social.

 

En este punto volvemos a encontrar la misión transecular, por la que la universidad hace un llamamiento a la sociedad para que adopte su mensaje y sus norma: inocula en la sociedad una cultura que no se ha hecho para formas previsibles o efímeras del hic et nunc, sino que se ha hecho para ayudar a los ciudadanos a vivir su destino hic et nunc; la universidad descansa, ilustra y fomenta en el mundo social y político valores intrínsecos de la cultura universitaria: la autonomía de la conciencia. La problematización (con la consecuencia de que la investigación debe permanecer abierta y plural), la primacía de la verdad sobre la utilidad, la ética del conocimiento, de ahí esta vocación expresada en la dedicatoria del frontispicio de la universidad de Heidelberg: "al espíritu vivo"      

 

3.2      En los ultimas décadas ha surgido una tendencia de volver ha enseñar ética, y moral en la educación superior. Eventos y congresos sobre reflexiones sobre valores de las últimas décadas. Año, eventos y temas a continuación se reseñan algunos de éstos:

 

* 1981 V congreso mundial de ciencias de la educación en Québec Canadá. En la Escuela y los valores

 

* 1981 Congreso de la oficina internacional de la enseñanza católica en Bangkok tema Educar en valores para las escuelas del año 2000.

* 1981 Congreso internacional de educación en Buenos Aires Argentina.  Valores de la persona y técnicas educativas. 

 

* 1983 XIV Congreso interamericano de educación católica en caracas  tema Año 2000: Pedagogía de valores ético sociales para nuestros pueblos.

* 1997 Cumbre internacional de Educación. Conferencia de Educadores americanos en México.

 

* La educación centrada en valores es una educación centrada en el hombre en la cumbre internacional de Educación. Conferencia de Educadores americanos en México. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Resumen analítico del artículo

 

En el cuadro No 1 se presenta un resumen de lo expuesto en este artículo 

 

Cuadro no 1. La formación de valores en las diferentes épocas de la historia de la educación colombiana. 

 

 

 

 

ETAPAS

 

VALORES A

FORMAR

 

TRANSFORMACION

DE VALORES

FUNDAMENTOS FILOSÓFICOS Y  ACADÉMICOS PARA  LA    FORMACIÓN DE VALORES

 

ÉPOCA DE LA COLONIA

1500-1819

 

 

 

Obediencia

Sumisión

Austeridad

Respeto a la autoridad

 

 

Al finalizar el siglo XVII, surge la rebeldía hacia  la corona  española.

 

Hubo un modelo educativo intencional evangelizador  basado en la religión católica

 

ÉPOCA DE LA REPÚBLICA

1820-1839

 

Libertad

Equidad

Justicia

Igualdad

 

 

Obediencia al estado

La constitución y el concordato adoptan oficialmente la religión católica.

 

 

Se inspiró en las ideas de la Ilustración y  el modelo Lancasteriano.

 

ÉPOCA DE LA

MODERNIDAD

1840-1919

 

Civismo

Derechos humanos

Salud

Felicidad

Solidaridad

 

 

 

 

Surge el sentido de acumulación de dinero y el   contrabando.

 

El modelo se inspiró en la escuela activa o escuela nueva

 

ÉPOCA DE LA REFORMA A LA MODERNIDAD

1920-1959

 

El saber

El trabajo

La familia

La amistad

 

El dinero empieza a verse como valor de cambio y pierde su valor intrínseco. Se privilegia el tener sobre el ser.

 

El modelo se ha inspirado en el  Taylorismo y las técnicas de Administración

 

 

ÉPOCA DE LA EDUCACIÓN TECNOLÓGICA

1960-1999 

 

Éxito

Ocio

Placer

Poder

Surge crisis de valores

Consumismo

Intolerancia

Irrespeto

Violencia

Corrupción

Surge el narcotráfico

 

El modelo se inspiró en el desarrollismo, el neoliberalismo y su  interés   se ha centrado en formar ciencia y técnica 

 

Comienzos del siglo XXI

2000-2004

 

Estética corporal

Ambición

Conservación del ambiente

 

Se inicia nuevamente

un período de   concientización para 

formar en valores

 

 

La UNESCO y los foros internacionales   recomiendan formar nuevamente en valores

 

 

 

 

CONCLUSIONES

 

Los modelos educativos establecidos en Colombia tuvieron una preocupación  constante por enseñar ética, moral y valores, esta tendencia permaneció incólume desde la época de la colonia hasta el año de 1980. Con los avances científicos y técnicos, el surgimiento de la telemática, la implantación del neoliberalismo  y la globalización esta tendencia se revirtió y la formación  axiológica quedó relegada.

 

La educación deberá variar sus metodologías. El modelo educativo colombiano tendrá que hacer grandes esfuerzos para introducir un eje transversal que en forma sistémica, holística y pedagógicamente fundamentado  se articule a las: disciplinas, asignaturas y temas. Los contenidos axiológicos se deberán establecer no solo en las carreras cuya orientación este dirigida a las ciencias humanas sino en las técnicas y la ciencias exactas. 

 

Para los estudiantes y aún para los profesores, las escasas asignaturas de ciencias humanas orientadas a la enseñanza de la ética, la moral,  los valores, el civismo y las buenas costumbres que  aparecen aún en los planes de estudio de las carreras técnicas son consideradas como "rellenos",  término despectivo que significa que son asignaturas sin importancia que se colocan en los programas curriculares. Esta actitud ha conducido a que muchos profesores y  estudiantes, terminan por no entender la pertinencia de estas asignaturas en los currículos y por ende no distinguen entre instrucción y educación ni entienden el concepto de formación integral. Por tanto, urge enseñarles a los profesores y estudiantes las diferencias entre los conceptos de: Educación, instrucción y formación integral para que entiendan la pertinencia de la existencia de las asignaturas en ciencias sociales en los programas de las carreras técnicas.

 

La formación unidimensional  que rivaliza con la integral es una intencionalidad que se orienta desde los centros de poder como expresión del fenómeno  del liberalismo y la globalización resquebrajando los modelos educativos y las orientaciones nacionales. De ahí la importancia de rescatar un modelo educativo propio con una estructura  axiológica que responda a  las necesidades colombianas.

 

Por fortuna la tendencia que se avecina en los comienzos del siglo XXI y como  una recomendación de la UNESCO, los foros y congresos internacionales sobre educación consiste en recuperar la senda de  formación axiológica y así nuestra sociedad este conformada por individuos integrales formados  solidamente en conocimientos y educados en ética moral y valores para que cumplan a cabalidad con su encargo social.

 

 

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* Director del programa Vinculación a redes académicas de investigación del ITM. Economista Ind. U de M, Especialista en Economía de la Empresa de la Escuela de Administración de Empresas de Barcelona. Especialista en Administración y Gestión Dinámica de la Escuela de Administración de Empresas de Barcelona,  España. Diplomado en Proyectos de Cooperación Internacional del ILPES. Diplomado Agente de Desarrollo Local, Universidad Nacional de Colombia. Candidato a Doctor en Ciencias Pedagógicas, Universidad Pinar del Río, Cuba.     

 

[1] Cfr. ORTEGA, Sergio. Editor. De la santidad a la perversión. Edit. Grijalbo. México. D. F. 1985. p.22 

[2] ECHEVERRI, Alberto. Santander y la instrucción pública. Edit  Foro Nacional por Colombia. Universidad de Antioquia. Medellín, 1989.p 19  

[3] Cfr, García, Antonio. ¿A dónde va Colombia? Edit. Tiempo Americano. Bogotá, 1981, p. 28 

[4] NIETO CABALLERO, Agustín. La escuela y la vida. Edit. Instituto Colombiano de Cultura. Bogotá 1979. p.31.   

[5] NIETO CABALLERO, Agustín. Nuestros ideales. En: La escuela y la vida. Instituto Colombiano de Cultura. Bogotá. 1979. p. 189.

[6] CARRION CASTRO, Julio Cesar. Itinerario de nuestra escuela. Ed. Cooperativa editorial magisterio. Santa fe de Bogotá. P. 115

[7] HERNÁNDEZ, Carlos Augusto. La reforma curricular: cientifismo y taylorización. Revista Educación    y Cultura. CEID-FECODE. Bogotá, septiembre , 1984  

[8] Cfr. GARCÍA GUARDILLA, Carmen. Producción y transferencia de paradigmas teóricos en la investigación socio-educativa. Fondo Editorial Tropykos. Caracas. Venezuela. 1994

[9] Merani, Alberto. Ibid p. 21

[10] MUÑOZ REDOM, Joseph. La bolsa de los valores materiales para una ética ciudadana. Editorial Ariel, p 201

   

[11] GUZMÁN CAMPOS, Germán. La violencia en Colombia : estudio de un proceso

Bogotá, Carlos Valencia Editores, 1980.

 

[12] BUITRAGO RICO, Edgar. periodismo y corrupción. Revista Probidad  No 21 Valle-colombia  febrero de 2003.

[13]  UNESCO. Recomendación sobre políticas educativas al inicio del siglo XXI. Reunión de los Ministros de Educación de América Latina y el Caribe reunidos en Cochabamba, Bolivia, del 5 al 7 de marzo del año 2001, a celebrar la Séptima Reunión del Comité Intergubernamental del Proyecto Principal de Educación (PROMEDLAC VII).

 


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