LOS GRUPOS PROFESIONALES Y SU FUNCIONALIDAD
SOCIAL: LAS PROPUESTAS ANALITICAS DE H.
SPENCER, E.DURKHEIM Y T.PARSONS
La revisión de los grupos
profesionales como grupos monopólicos y de poder inició su auge a partir de los
años 60 del siglo pasado en los países desarrollados principalmente en los
anglosajones, pero podemos rastrear su origen o parte de él en las propuestas
de algunos sociólogos clásicos que escribieron a finales del siglo XIX, y
principios del XX quienes buscaban
explicar el cambio que la sociedad vivía en ese momento. Esta línea de trabajo
se conoce como
sociología de las
profesiones.
En el presente artículo presentamos
una revisión de algunos textos escritos por tres importantes sociólogos
clásicos quienes ubicaron a estos
grupos profesionales como grupos sociales diferenciados y que vislumbraron la
importancia que podrían tener en el futuro, estos autores son: Herbert Spencer,
Emilio Durkheim y Talcott Parsons cuyas propuestas sirvieron de base para la
configuración de líneas de análisis en el estudio de las profesiones.
Cada uno de estos sociólogos
desarrolló al menos un artículo en el cual se refieren de manera específica a
los grupos profesionales a los que identificaron como grupos sociales que
merecía atención y un análisis concreto aunque la importancia que les dieron
fue diferente. Los trabajos están enmarcados dentro del paradigma positivista-funcionalista
y dentro de la teoría general de la sociedad que cada uno sostiene. Presentamos
la pregunta que desde nuestro punto de vista ellos tratan de responder, su
posible hipótesis de trabajo y el armado lógico que muestran en su trabajo.
Tanto para H. Spencer como para E. Durkheim, el
objetivo es entender cómo la sociedad
establece una nueva organización en el paso de la sociedad doméstica a la sociedad moderna; de la sociedad militar a la sociedad
industrial en Spencer, y de la sociedad orgánica a la sociedad mecánica en
Durkheim. T. Parsons escribe ya plenamente en la sociedad moderna así que su
contexto cambia y su pregunta también, para él es importante conocer cómo se configura
el rol profesional y la función que cumplen estos grupos en la estructura
social general. No presentamos de manera amplia la propuesta sociológica de
estos autores sino sólo lo referente al estudio de los grupos profesionales.
Herbert Spencer (1820-1903)
El primer autor que analizamos, que hace referencia a las profesiones como
grupos sociales diferenciados es Herbert Spencer, sociólogo inglés conocido por su visión evolucionista y
utilitarista de la sociedad, para quien el cambio social es explicado como
un proceso hacia una mayor complejidad social.
En su texto El origen de las profesiones (Spencer, 1905) Spencer parte del principio de que la vida de
la sociedad es interdependiente y esa interdependencia aumenta conforme la
sociedad se complejiza, por tal razón el primer objetivo a lograr para mantener
la estabilidad de una sociedad es la preservación de la paz social. Para ello
se deben establecer las reglamentaciones e instituciones sociales necesarias
para la defensa y la regulación de la vida individual con lo que se logrará la
conservación de la vida del organismo social. Este paso permite que la sociedad militarista llegue a ser una
sociedad industrial o industrializada, siendo en esta última donde empiezan a
surgir por diferenciación, los grupos especializados o profesionales que buscan
que los sujetos ya pacificados tengan más y mejor tiempo de vida.
Spencer no define lo que entiende
por una profesión, pues no es su pregunta base, para él es importante saber
¿Cuál es la utilidad de los grupos profesionales en la nueva sociedad
industrial? Y da su propia respuesta: son los encargados de aumentar la vida (cursivas nuestras) que
es lo que actualmente entendemos por proporcionar mejor calidad de vida, por
ejemplo “el médico cura y hace desaparecer los dolores”, cura las enfermedades
y aumenta la duración de la vida, el músico y el bailarín exaltan las emociones
y permiten el goce de la vida, el poeta y el actor nos proporcionan sensaciones
agradables y nos mejoran la vida (Ibíd.:
5-11).
Para Spencer las ocupaciones que se reconocen como profesiones en ese momento
son: médico y cirujano; bailarín y músico; orador y poeta; actor y autor de arte dramático; biógrafo,
historiador y literato; hombre de
ciencia y filósofo; juez y abogado; profesor;
arquitecto; escultor y pintor. Como vemos para él el arte y las
humanidades tienen mucha importancia.
Siguiendo la teoría de Spencer todas
las estructuras de la sociedad surgen
por diferenciación de un mismo tejido social relativamente homogéneo, y las
profesiones no son la excepción, pues para él éstas tienen sus raíces en la
organización político-eclesiástica primitiva la cual al dividirse en una
organización política y otra eclesiástica es ésta última la que mantiene dentro
de sí el germen del profesionalismo por ser la que conserva el monopolio del
saber. Así, en los diferentes capítulos de su escrito Spencer hace una revisión de cada uno de los grupos
afines que él señala como profesiones, haciéndolos derivar de esa organización
eclesiástica, por ejemplo el médico y el sacerdote no se distinguen en la
sociedad primitiva pues un mismo sujeto puede ejercer las dos actividades
igualmente las funciones de enseñanza fueron ejercidas primeramente por el
sacerdote y posteriormente por el profesor.
La derivación de las otras
profesiones de la misma organización eclesiástica la muestra de la siguiente
manera: por ejemplo la pintura y la escultura florecieron cuando fue necesario
preservar la imagen divina en pinturas y esculturas sacras siendo éste el inicio del desarrollo de dicha profesión.
Posteriormente la realeza también quiso preservarse a sí misma y buscó a los
mejores pintores para que su imagen fuera
plasmada en el lienzo.
Para explicar el surgimiento de las
otras profesiones como las de bailarín y músico, nos dice que “los movimientos musculares en
general son producidos por los sentimientos ya sean ligeros o violentos” (Ibíd.: 34), y si bien en un inicio son
desordenados, poco a poco se van
estructurando hasta llegar a lo que llamamos danzas y en el caso de los músicos
las notas aisladas llegan a convertirse en cantos, haciendo así su propia
profesionalización, pues las danzas y los cantos también están destinados a la
glorificación sacramental, real o del jefe laico. De igual manera, el biógrafo,
el historiador y el literato, tienen sus raíces en esa glorificación
sacramental y/o laica que queda pasmada en poemas, odas o aún en la misma
historia. Los profesionales manejan capacidades intelectuales que no tiene la
mayoría de los otros grupos sociales lo que los hace ser reconocidos y sobre
todo les permite vivir del desarrollo de su trabajo intelectual.
Emilio Durkheim (1958-1917)
La propuesta de Emilio Durkheim
sobre cómo entender a los grupos profesional a también está inmersa en su
propia visión de la sociedad total. A
Durkheim le preocupa la disgregación de la sociedad moderna y la pérdida de los
lazos morales que mantenían unida a la anterior sociedad, en otras palabras lo
que sucede en el momento del paso de la sociedad mecánica a la sociedad orgánica.
En el texto “La división del trabajo social”, escrito en 1893 como tesis doctoral, Durkheim
analiza el papel que tiene la división del trabajo social en la construcción de
la sociedad moderna y dentro de ella la importancia que tienen la moral social
y la moral especifica de los grupos intermedios para mantener la cohesión
social. Su primera pregunta la podríamos
explicitar de la siguiente forma: ¿de qué manera podemos evitar la disgregación
social y moral en el paso de la sociedad antigua a la sociedad moderna?, y la
específica como ¿Cuál es el papel que los grupos intermedios, (grupos
profesionales, corporaciones, etc.) juegan en este intento?
En el prefacio a la segunda edición
escrito posteriormente y que titula “Algunas
observaciones sobre los grupos profesionales” Durkheim busca dar respuesta a algunos puntos
que había delineado en el transcurso del libro pero que no los había desarrollado
del todo, principalmente “[…] el papel que las agrupaciones profesionales están
destinadas a llenar en la organización social de los pueblos contemporáneos[...]”(Durkheim,
1998: 7), y lo sustenta mediante la elaboración de un recuento histórico
general sobre el desarrollo de las corporaciones. Para Durkheim las
agrupaciones profesionales existen desde que surgen los oficios, desde que la industria deja de ser puramente agrícola
y las personas que desarrollan un mismo
oficio se juntan, es decir,
Desde el momento que, en el seno de una
sociedad política, un cierto número de individuos encuentran que tienen ideas
comunes, intereses, sentimientos, ocupaciones que el resto de la población no
comparte con ellos, es inevitable (…) que entren en relaciones, se asocien, y
formen poco a poco un grupo limitado con su fisonomía especial, dentro de la
sociedad general (Durkheim, 1998: 21-22).
Según Durkheim, en Roma y en la edad
media, las corporaciones eran grupos sociales ya diferenciados, en los cuales
se compartía no sólo un oficio sino que eran grupos de vida (cursivas nuestras) que estaban unidos por fiestas y
ritos comunes. De la misma forma, Durkheim hace referencia al grupo familiar
para señalar su semejanza con una corporación, pues ambas se formaban según el
modelo de la sociedad doméstica y su diferencia consiste en que en la familia
los miembros ponen en común la totalidad de su existencia, mientras que en las
corporaciones sólo ponen sus intereses profesionales.
Pero el grupo profesional debe
hallarse en relación directa con la actividad
y la vida económica de la sociedad a la que pertenece, pues cuando un
grupo secundario entra en discordancia con la vida económica, puede dejar de
ser funcional para la misma sociedad y desaparecer, eso explica el declive de
las corporaciones durante un periodo de la historia, pero éstas renacieron
hacia los siglos XI y XII, cuando los artesanos inician nuevamente las
asociaciones gremiales. Al lograr nuevamente la funcionalidad social, las
corporaciones artesanales empiezan a tener nuevamente importancia social.
Como lo señalamos anteriormente,
para Durkheim la corporación es en realidad la heredera de la organización
doméstica familiar creadora de la moral y el derecho domésticos y es a la corporación
a quien le corresponde elaborar la moral y el derecho profesionales pues
en ella . “[…] la comunidad de intereses ocupa el lugar de los lazos de sangre
[…]” (Ibíd.: 19), pero además debe
crear los órganos apropiados para su regulación y elaborar su propia moral
profesional, su propia manera de relacionarse entre grupos económicos
semejantes y grupos económicos diferentes, pues, “[...] dondequiera que se
forma un grupo debe formase también una disciplina moral [...]” (Ibíd.: 34).
Así para Durkheim esta nueva
organización social, toma cada vez más impulso económico y social al grado que
desde su punto de vista, podría llegar a convertirse en la base de la
organización política moderna pues si continúan
su progreso en el mismo sentido, las corporaciones gremiales y las asociaciones
profesionales podrán ocupar un lugar cada vez más importante en la constitución
de la nueva moral social.
Una preocupación profunda en Durkheim
es la anomia social, la sociedad
desregulada, pero nos dice que una forma de evitarla es precisamente regulando
estos grupos secundarios, exigiendo que tomen el lugar que les corresponde
dentro del mundo social y político; y su moral especifica será clave para el
desarrollo social y el manejo político adecuado, pues con estas reglas
especificadas se puede garantizar la probidad profesional al impedir el engaño
al comprador o cliente, “el grupo profesional como poder moral capaz de
contener los egoísmos individuales […]” (Ibíd.:
17), ya que así como a la sociedad le interesa la formación de grupos para
regular actividades colectivas, al individuo también le interesa pertenecer a
estos grupos, sentirse parte de algo y seguir reglas.
Talcott Parsons (1902-1979)
Talcott Parsons considerado como el
sociólogo clásico más importante dentro de la tradición norteamericana escribe
en otro contexto social y temporal, durante los años 50-79 del siglo pasado en
Norteamérica, y ubica a las profesiones
como grupos preponderantes ya bastante diferenciados dentro de la estructura
ocupacional de la sociedad occidental moderna.
Es un autor “moderno” que escribe sobre la sociedad occidental y su
propuesta se inscribe dentro de su teoría general de la sociedad al tratar a los grupos profesionales en
función del rol que juegan en esa sociedad.
Parsons dedica varios artículos a explicar el
papel de los grupos profesionales en la sociedad moderna, uno de ellos publicado en
1939 titulado “Las profesiones y la estructura social”, y otro denominado "Profesiones liberales" publicado en 1979, ambos de relevancia para comprender
a los grupos profesionales.
En
el primer artículo Parsons define los rasgos
que debe
tener una ocupación para ser considerada como profesión y empieza a distinguirla de otras actividades
también importantes en la sociedad norteamericana. Tal es el caso de la
distinción que hace entre los negocios y las profesiones, o mejor dicho entre
los hombres de negocios y los profesionales: mientras el hombre de negocios
sólo busca su propio beneficio, su éxito económico y personal, sin importar el
interés de los demás, el profesional hace juramento de apoyo a los otros y su
interés principal puede ser el alivio de
algún mal social, cubrir alguna necesidad para el beneficio social o aportar algo
al bien común y en ese sentido la ganancia
económica no es su interés principal, “[...] a los profesionales, […] se los
concebía por encima de estas sórdidas consideraciones: eran los que consagraban
sus vidas al ’servicio’ de sus prójimos[...]” (Parsons, 1939: 41). Aunque “[...]
las metas esenciales en ambos casos parecerían esencialmente las mismas: el
logro de objetivos y de reconocimiento […] la diferencia radica en la
diversidad del camino para llegar a metas semejantes, que a su vez se
determinan por las diferencias entre las respectivas situaciones ocupacionales
[...]” (Ibíd.: 42). Ambos buscan
prestigio social y tener una buena reputación, pero el profesional se apoya en
la ciencia y su progreso para el beneficio social, por lo que la intención
final entre ambos es diferente y los valores en que se sustentan también lo
son.
En este trabajo Parsons anota
las características básicas que desde su punto de vista debe poseer un
profesional, a) El primer rasgo se refiere al servicio altruista que el profesional debe manejar como algo que lo
distingue de otros grupos sociales (por ejemplo de los comerciantes), b) el segundo rasgo es la autoridad profesional que el lego le
reconoce al profesional, es lo que hace
al individuo común obedecer “órdenes médicas” o le obliga a contestar las preguntas que no
contestaría a otra persona que no posea esa autoridad profesional reconocida y
que se basa en el tercer rasgo c) la competencia
técnica que poseen estos grupos por sobre el común de la población, esta
autoridad le es reconocida sólo en su área de competencia y no en otras en
donde él mismo se convierte en lego.
Esta primera aproximación a las
profesiones fue ampliada por este autor en su artículo Profesiones Liberales escrito en 1979 como un apartado dentro de
la Enciclopedia Internacional de las Ciencias
Sociales. En este artículo hace ya
la distinción entre dos tipos de profesiones: a) Las profesiones que se dedican
al desarrollo de las disciplinas intelectuales y b) las que buscan la
aplicación práctica de esas disciplinas. Dentro de las primeras destaca la
“profesión de la erudición” cuyas funciones principales son la transmisión de
la erudición a otros (docencia superior) y el desarrollo de la investigación
para el aporte de nuevos conocimientos. Estas profesiones mantienen una
primacía cultural y se desarrollan dentro de las universidades.
Por otro lado, las profesiones
que buscan la aplicación práctica de las disciplinas son a las que denomina
profesiones liberales, tienen una primacía social y entre ellas destacan la
medicina y el derecho.
Parsons reconoce que en ese
momento ya se empiezan a clarificar los
criterios internos del rol profesional, dentro del sistema de
profesiones, estos criterios son:
a) Una
formación técnica en regla, “acompañada de un procedimiento
institucionalizado que dé validez tanto a la adecuación de la formación como a
la competencia de los individuos formados”. (Parsons, 1979: 538). Parsons aquí
se refiere a la necesidad de que la competencia técnica de la que ya hablaba
anteriormente, sea avalada por una institución de educación superior
reconocida, por una universidad de prestigio.
b) Pero no sólo se debe dominar la competencia técnica, sino toda “una tradición cultural generalizada,
aunque específica de esa profesión” (Ibíd.:
538). Esta tradición cultural no solo debe ser entendida, sino comprendida de
manera profunda y dominada e interiorizada por el sujeto al grado de poder
responder de manera inmediata a cualquier necesidad urgente, (por ejemplo, los
médicos y las urgencias en la salud), o ante situaciones novedosas. Es interesante como se pueden encontrar puntos
de concordancia con la propuesta posterior de P. Bourdieu y su concepto de
habitus.
c) El tercer criterio interno que
menciona este autor para el desarrollo del rol profesional es el de responsabilidad
social, para Parsons “[…] una
profesión plenamente calificada y acreditada debe contar con algún medio
institucional para garantizar que la citada competencia se va a dedicar a
actividades socialmente responsables [...]” (Ibíd.: 538), lo que podríamos entender como el inicio del código de
ética profesional.
Estos son los criterios base para
distinguir a una profesión de cualquier otra actividad ocupacional, aunque
hacia el final del artículo señala un criterio más, que es el de trabajo a plena dedicación, lo cual significa que el profesional sólo debe
dedicarse a esa actividad para lograr su manutención, centrarse en su formación
y atención a los demás.
Si a estos criterios sumamos los
señalados anteriormente, podemos vislumbrar que Parsons delinea ya una primera
aproximación a la definición de la profesión a partir de las características o
componentes del rol profesional. Aún ahora podemos encontrar algunos de estos
rasgos permeado en el imaginario social del concepto actual del profesional
liberal. Aunque los escritos a los que aquí hacemos referencia tienen una
distancia de 30 años en su escritura, podemos ver que en realidad se
complementan y ambos responden a las preguntas de ¿cómo se constituye un rol
profesional (en el individuo)?, y ¿cuál
es la función que tienen esto profesionales como grupo dentro de la sociedad
moderna?
Conclusiones
Aunque la presentación que hacemos
es muy resumida, podemos sacar algunas conclusiones generales.
Tanto Spencer como Durkheim y
Parsons ven a los grupos profesionales
como grupos sociales diferenciados que tienen funciones específicas y que
adquieren cada vez más importancia social,
con un poder
específico en expansión tanto económico como político (más en los países
desarrollados) y con una visión social centrada en las necesidades públicas.
Ninguno plantea estos grupos
profesionales como algo separado de la sociedad y por tal razón no proponen un
modelo teórico específico para estos grupos, sino que están inmersos en su
modelo teórico general y se explican dentro de él, sólo resaltan la
funcionalidad de los mismos.
Para Spencer, lo importante es la utilidad de las
profesiones dentro del conjunto social y las explica dentro de la
diferenciación de la estructura social.
Durkheim ubica a las corporaciones y
gremios profesionales como uno de los grupos secundarios que deberán buscar
mantener la moral social particular de los grupos y de esa manera abonar a la
integración social en el paso de la sociedad mecánica a la sociedad orgánica,
explica el desarrollo de estos grupos dentro de la incipiente diferenciación
funcional de los procesos de trabajo social.
Y Parsons parte de su concepto de
rol social y la funcionalidad del mismo
y desarrolla los rasgos que a su juicio debe tener el rol profesional
para contribuir al mejor desarrollo de la sociedad occidental moderna.
Por último y como mencionamos al
inicio, estas propuestas de análisis fueron retomada por varios autores posteriores mismas
que sirvieron de base en el desarrollo la línea de estudio de la sociología de las
profesiones sobre todo de la rama que trabaja a la profesión como resultado de
un proceso histórico que se consolida con el paso de los oficios y las
ocupaciones a las profesiones modernas en situaciones sociales e históricas
específicas. Son entonces parte de los
orígenes de esta propuesta.
Bibliografía básica:
Durkehim, Emilio (1998), La división del trabajo social, Ciudad de
México,
Editorial Colofón.
Parsons, Talcott (1939),
“Las profesiones y la estructura social”, en Ensayos de teoría sociológica. Buenos Aires, Paidós.
Parsons,
Talcott (1979), "Profesiones liberales", en Enciclopedia Internacional de las Ciencias Sociales, tomo 8.
España, editorial Aguilar.
Spencer, Herbert (1905) El origen de las profesiones, Editorial Sampere, Valencia España.