Sincronía
Winter 2010


Nacionalismo y perdición: La gaviota a través de Otelo  

David M. Jones Ph.D.
Assistant Professor of English
Arkansas
State University – Beebe
dmjones@asub.edu


 

            Cecilia Böhl de Faber, también conocida como Fernán Caballero, escribió La gaviota, un cuadro de costumbres en lo que “exaltó lo que ella consideraba ideal de la vida del pueblo, su humildad, su apogeo a las tradiciones, sus creencias religiosas” (Cantos 190).  Caballero se oponía a los cambios que transcurrían a causa de la liberalización y modernización del país y en el campo de España encontró un paraíso folklórico.  Aunque era extranjera, Caballero “se da cita a un costumbrismo teñido de tonos nacionalistas” (Cáseda 77).  Ella era nacionalista y conservadora:  “Fernan Caballero sensed the pressure for change and she urged Spaniards to hold to the old institutions, customs, and beliefs by depicting them in a favorable light.  She fought for the statu quo” (Qualia 65).  En La gaviota, el alemán Frederico Stein decide terminar su viaje en el pueblo Villamar porque ahí encuentra todo lo que había estado buscando.  En Villamar se casa con Marisalada que canta hermoso y  a través de ella, Caballero continúa el tema del  viaje cuando Marisalada decide mudarse a Sevilla, para cantar ópera.  Sin embargo, Caballero tiene un concepto muy específico de quien puede embarcar en el viaje de búsqueda y por qué.  A través de la ópera Otelo de Gioacchino Rossino, se ve la traición  de Marisalada contra España.  Entonces por  las teorías de Joseph Campbell y Anis Pratt entenderemos mejor la ideología nacionalista de Caballero y veremos por qué España no debe cambiar.                    

            Caballero describe detalladamente a Marisalada en una representación de la ópera Otelo.  Esa obra era un gran éxito durante la época de la publicación de La gaviota (Schmidgall 5).  Momo, su hermano, llega a Sevilla para informarle que su papá quiere verle antes de morir.  En Otelo, Desdémona se casa con el moro Otelo.  La obra enfatiza que Desdémona se enamoró de un hombre de diferente nacionalidad.  A causa de la manipulación de Iago, Otelo cree que su esposa le es infiel y la mata.  En esa escena, Momo vio a una mujer castigada por no seguir las reglas de su cultura.  Sin embargo, Caballero no condena a Otelo por matar a Desdémona; ella recibió un castigo justo por traicionar su propia cultura.  También culpa a Marisalada por su perdición.  

            La tía María, mamá de Marisalada, describe a Villamar como un lugar puro en España, porque según ella nunca fue conquistado por los moros.  Cuando Stein llega casi muerto al pueblo, ella sospecha de él.  Con el tiempo, él se gana la confianza de la familia por ser médico y tener  habilidades muy especiales; rápidamente ganó gran popularidad en el pueblo.  La cultura folklórica por lo general es más fuerte en lugares rurales como Villamar.  A Stein no le interesa irse a Sevilla, sin embargo su esposa desea tener una nueva vida,  así que se mudan de una casta parte de España donde los moros nunca tuvieron control a un lugar donde si lo tuvieron.  En Sevilla las tradiciones folklóricas no se ven tanto como en el campo.  Marisalada sale de su cultura tradicional, y como Desdémona, Caballero la castiga no con la muerte sino con una vida miserable.  Así, Caballero presenta no solamente el destino triste de Marisalada, sino que describe lo que ella cree correcto de la mujer en su sociedad, que es mantener las tradiciones.  Por lo que, el trágico error de Desdémona fue casarse con un moro y el de Marisalada fue salir del casto pueblo. 

            En The Hero with a Thousand Faces, Joseph Campbell describe la búsqueda de los héroes masculinos en la mitología.  Al principio, una crisis es lo que hace al héroe salir de su sociedad para buscar información o un objeto necesario.  Durante la búsqueda, guías ayudan al héroe con sus pruebas, como confrontar a la muerte y enfrentar la “sombra” de su mente inconsciente.  Después sucede la “boda sagrada” en la que el héroe acepta a su “ánima,” el aspecto femenino de sí mismo.  Al final encuentra el conocimiento de sí mismo y una felicidad ideal, pero tiene que regresar a la sociedad y enseñar a los demás lo que aprendió.   En Stein se observa una búsqueda semejante; no obstante, Nicolás Fernández-Medina escribe que:

Removed from the Eden of Villamar by María, Stein’s disillusionments with his world is concretized in the city and, more specifically, in the bullring, where his dream of spiritual harmony is squelched by the reality of a world that cares nothing for him or his faith.  In this light, Stein’s spiritual quest does not adhere to the Campbellian monomyth exactly, but it is more aptly founded upon what Propp defined as victimization and loss, or a quest of re-embracing a religious identity and on the one hand (a ‘self-realization’ and a return of unity and order in a divided spiritual self in Jungian terms), and the social experience of confronting the dissolution of a true, meaningful faith on the other. (412-13)

Fernández-Medina tiene razón en que el viaje de Stein no sigue perfectamente la teoría de Campbell;  sin embargo, en Caballero hay que investigar cuando y porque la búsqueda de Stein es diferente y así se descubre la filosofía costumbrista de Caballero.

            Stein salió de Alemania en busca de trabajo y llegó a España.  Confrontó a la muerte cuando la tía María y Gabriel le encontraron en el umbral de la puerta del convento.  Todos en Villamar reconocen sus grandes habilidades como médico y tiempo después se casa con Marisalada.  Se siente en el paraíso y desea quedarse en Villamar.  La búsqueda de Stein parece incompleta porque nunca regresa a su sociedad, sin embargo Caballero tampoco regresó a Suiza; ya que según ella no se debe de abandonar la perfección del costumbrismo español.  Caballero demuestra eso en Stein, quien prosperaba en Villamar pero muere al irse a Sevilla.  Los nativos de Villamar tampoco deben irse del pueblo.

             De los tres extranjeros que visitan Villamar, el duque de Almansa es el único que no se siente atraído por la vida del pueblo, porque a él le importa solamente la ambición de la sociedad.  El duque está enamorado de Marisalada y le pide ir a Sevilla con él.  Así ella se separa de su sociedad para empezar su búsqueda.  Aunque Campbell escribe muy poco sobre las viajes de las heroínas hay otros que prestan más atención al asunto.

            En Archetypal Patterns in Women’s Fiction, Anis Pratt describe la búsqueda de las héroes que tiene mucho que ver con la descripción de Campbell pero hay varias diferencias importantes.  Al principio de la búsqueda, la heroína tiene más que ver con la necesidad de liberarse de sus obligaciones sociales, porque aunque ella empiece en un estado de inocencia como el héroe,  ella está encarcelada por las estructuras patriarcales.  Pratt dice que muchas de las guías que la ayudan, solamente quieren encarcelarla de nuevo.  Igual que para los hombres, esta búsqueda representa el descubrimiento de sí mismo y hacer consciente lo inconsciente.  De tal manera, la persona se completa.  Sin embargo, tradicionalmente la sociedad enseña a las mujeres que solamente se completan a través de un hombre y el amor romántico, una parte de su viaje es liberarse de esa idea para que pueda entenderse y desarrollarse como individuo.  En el proceso de enfrentar la muerte y otras pruebas, la heroína tiene que escoger entre asociarse con dos personas, con frecuencia son hombres.  Un hombre acepta su libertad y el otro quisiera encarcelarla de nuevo.  En la búsqueda del héroe que Campbell describe, una figura paternal aprueba el cambio del héroe pero en la de Pratt la heroína se da cuenta de que la figura paternal es peligrosa así que se une con una figura maternal. Al final, la heroína a veces se niega regresar a su sociedad pero lo tiene que hacer.  Pratt habla más de la influencia de la heroína sobre su familia que Campbell.  La transformada heroína también transforma a los que están cerca de ella y así gana su respeto y transforma a la sociedad (13-37, 166-177).  Marisalada participa en aspectos de la búsqueda que Pratt describe pero no en todos.                     

            En pueblos como Villamar, las personas suelen quedarse.  Stein lo hizo porque le encanta la vida del pueblo; sin embargo, las costumbres también mantienen a la gente ahí.  Para ir a Sevilla, Marisalada tiene que liberarse de muchos aspectos de la domesticidad del pueblo que la atrapan.  La tía María quiere que toda su familia se quede en el pueblo, y por eso le cuesta entender la nueva ambición de su hija Marisalada.  Pratt describe el principio del viaje como una separación completa de su vida anterior.  Marisalada hace el viaje junto con su esposo Stein y, según la teoría de Pratt, se puede decir que ella nunca comienza el viaje; en Pratt el viaje es a solas.  Sin embargo, Marisalada se aleja emocional y físicamente de él y finalmente se separan.  Pratt dice que en su búsqueda, la heroína se completa sin un hombre y supera la idea de tener un hombre para estar feliz. 

            La característica más destacada de Marisalada es su hermosa voz, y Stein le enseña a cantar.  Lo hace dentro de las costumbres de Villamar.  Ella canta melodías españolas mientras él toca la flauta.  En Sevilla, Marisalada continúa estudiando, pero esta vez con la ayuda de un maestro profesional que la enseña dentro de las tradiciones de la ópera y música clásica.  Entonces se puede decir que ella nunca realizó el viaje.  Sin embargo, el hombre guía es común en obras del siglo 19 por ejemplo en La Regenta y Tristana, la mujer es incapaz de desarrollarse sin un hombre.  Por eso hay que aceptar la presencia del hombre en su búsqueda. Marisalada está feliz con su vida en Sevilla y no se lamenta de las limitaciones como Ana y Tristana.  El propósito de su entrenamiento es convertirla en cantante de ópera, un tipo de música que Slavoj Žižek muestra como parte del sistema patriarcal. 

            Fuera de óperas como Aida y Turandot, no hay muchos papeles que presentan mujeres fuertes, y Aida y Turandot también se someten a los hombres.  Eso es lo que le pasa a Marisalada.  Su infidelidad y su vida parecen acercarla a la libertad por un ratito.  En Pratt, la heroína a menudo tiene que escoger entre dos hombres, el  que la encarcela y el que no.  Los dos hombres en la vida de Marisalada son muy diferentes.

            En el proceso de alejamiento con su esposo, Marisalada desarrolla una relación ilícita con el torero Pepe Vera.  Su apellido “puede ser un adjetivo femenino que indica la veracidad.”  Irónicamente, Caballero hace hincapié en la falta de fidelidad (Larsen 339).  Además, Marisalada es sometida por el celoso Vera.  El insiste en que lo acompañe a su corrida sabiendo que ella se encuentra enferma.  No quiere ir, sin embargo lo hace porque él amenaza con abandonarla.  Así el torero se muestra egoísta al no pensar en el bienestar de su amante.  Un toro le da muerte, y desde entonces la salud de Marisalada empeora y pierde su voz.  Por escoger al hombre machista, ella es castigada por perder la habilidad que le dio la independencia en Sevilla que tanto disfrutaba.  La vida con su esposo Stein era totalmente opuesta a la que vivió con Vera.       

            Stein no dominaba ni controlaba a su esposa y aunque él prefería quedarse en Villamar, también aceptó la decisión de ella de irse a Sevilla.  El es convencido por el duque de que tal cambio le daría a ella la oportunidad de desarrollar su potencial completamente y se va de Villamar, pensando en el bienestar de su esposa.  Stein no era egoísta y así, Marisalada tenía libertad y su característica voz que la hacía única y respetada por los demás.  Un propósito de la búsqueda es ser individual y con Stein ella lo logró. Sin embargo, el propósito de los viajes de Campbell y Pratt es cambiar, pero para Caballero, cambiar era un anatema.    

            Caballero vivía en la época en que España empezaba a cambiar.  Las fuerzas de la liberalización amenazaban con hacer cambios que le eran desagradables a la autora.  Caballero creía en la tradición y escribía obras del cuadro de costumbres que promovían la vida tradicional.  También se oponía al cambio de los campesinos, cuya vida Caballero admiraba tanto.  Por eso en La gaviota, los extranjeros que llegan a Villamar encuentran un paraíso sin necesidad de regresar al mundo de donde son originarios.  Según Caballero, el patriarcado lo hace un paraíso.  La figura patriarcal más importante para Marisalada es su moribundo padre, quien está en Villamar y quiere verla antes de morir. 

La familia manda a Momo, hermano de Marisalada, a  Sevilla para llevarla al lado de su padre.  Es la primera vez que él deja su país y la pasa terrible porque nadie lo trata bien y cree ser testigo del asesinato de su hermana.  Momo no conoce la ópera y mucho menos la obra de Shakespeare Otelo.  Ninguna de las dos son obras españolas.  Tampoco sabe que es el teatro, y cuando Otelo mata a Desdémona, Momo cree que Marisalada realmente está muerta y por eso regresa a Villamar enfurecido y desilusionado de Sevilla.  Lo único que aprendió de su búsqueda, es nunca irse de Villamar.  Así la idea principal de la novela es que la búsqueda nunca se debe de  iniciar.  El propósito del viaje era reconectar a Marisalada con su padre, figura paternal que ella buscaba y que no encontró en el torero.       

            En “La Morada del Padre. Pasión y Limite en <<La Gaviota>>” Javier Herrero nos explica como “la autora desarrolla el tema del conflicto entre pasión y limite” (175).  Villamar está ubicado al lado del mar y Marisalada (“Mar” y “salada”) es un nombre que lo evoca.  También su apodo “gaviota,” es un ave marina.  Herrero escribe que el mar representa conceptos de caos y pasión pero “frente a esa furia marina, las rocas de la costa significan el limite que la voluntad divina impone contra esas desatadas pasiones” (178).  Y sobre esas rocas:

Stein divisó las ruinas de un fuerte, obra humana que a nada resiste, a quien servían de base las rocas, obra de Dios que resiste a todo…  A la derecha, y en lo alto de un cerro, se descubrió un vasto edificio, sin poder precisar si era una población, un palacio con sus dependencias o un convento. (101-105)

Caballero asocia las rocas que limitan al mar con los edificios sobre ellas y el convento representa los límites que la Iglesia impone.  Esto es un elemento conservador que a Caballero le encanta.  También la morada de su padre impone límites que ni conquistan ni destruyen la pasión del mar, sino “La morada del padre nos muestra simbólicamente la posibilidad de transformar el diabólico mar en una energía creadora” (Herrero 179-180).  En ese simbolismo del poder patriarcal en Villamar sobre los elementos femeninos, las mujeres tienen cierto tipo de libertad al estar sometidas a los hombres.  Así se entiende mejor la visión distinta de Caballero sobre el viaje.

            Para Caballero los que viven en Villamar no tienen ninguna razón para salirse de allí porque al hacerlo se meterían en peligro. El patriarcado controla las pasiones destructivas del mundo femenino, y Stein también participa ese “sistema.”  Primero, “Stein, who has musical knowledge, undertakes to train Marisalada’s voice; the unromantic propositions is that German scientific expertise will tame wild, raw nature” (Johnson 83).  La razón lógica de Stein limitaba las pasiones de Marisalada y cuando esas pasiones se liberan en Sevilla, ella se destruye.  Además stein significa “roca” en alemán, y Caballero lo asocia con las rocas de la costa de Villamar que limitan el caos del mar (Herrero 175).  Pero Marisalada también se aleja de él al llegar a Sevilla.  Por lo tanto sin los límites del patriarcado, comienza una vida de vicios.  Pratt también habla de la importancia de la figura materna en el viaje.

            En su búsqueda, la heroína tiene que conectarse con la figura materna;  Marisalada no conoce a tal mujer en Sevilla, pero en Villamar la tía María resulta ser  su propia madre.  En Pratt, ella no sería una buena guía porque se somete al patriarcado.  La tía Maria conecta a su hija con los límites masculinos para iniciar una unión entre Marisalada y Stein, la roca.  Al empezar la búsqueda, Marisalada se libera de los límites que para Caballero son imprescindibles para mantener la cultura y las costumbres españolas.  Así, la búsqueda que lleva alguien fuera de Villamar es trágica porque solamente trae muerte y castigo.  Cuando Momo le dice, “Gaviota fuiste, Gaviota eres y Gaviota serás,” se niega la posibilidad del cambio que Pratt propone (390).

            Tradicionalmente en la vida de una mujer existen dos figuras patriarcales, el padre y el esposo.  Y a Marisalada, la muerte le tomó a los dos, y ella se siente culpable por la segunda.  Sin los límites que los hombres le proporcionan, Marisalada se pierde en la pasión y es castigada perdiendo su voz.  A la final de su búsqueda, regresa a Villamar y se casa con el cruel peluquero quien, irónicamente, canta muy mal las canciones tradicionales de España.  Al alejarse de las costumbres españolas pierde los límites importantes y también la felicidad.  Es raro que la autora, una mujer, desarolla esta ideología antifeminista:  “however, she combined the symbolic codes linking identity and action in such a way that her novel reproduced the contradictory nature of her position” (Kirkpatrick 336).  Además de usar el nombre en masculino, Fernán Caballero, ella somete su identidad al patriarcado.              

            La ópera Otelo simboliza la trágica traición de Marisalada a su cultura y al justo castigo que ella y Desdémona recibieron.  Stein llegó a Villamar  y  no quiso irse porque según Caballero encontró la ansiada felicidad.  Cuando Momo fue a Sevilla rápidamente se dio cuenta que prefiere  Villamar.  En el caso de Marisalada, el deseo de conocer la ciudad y seguir su ambición personal la llevo a Sevilla.  Al hacer esto, ella se aleja de su padre y esposo, las rocas de los limites.  Según Caballero,  la búsqueda de la heroína no se debe empezar porque las mujeres necesitan el patriarcado que limita su pasión femenina.  Así, el error grave es empezar el viaje.  Sin límites, Marisalada se extravía en la pasión ilícita.  Caballero demuestra que el balance entre lo femenino y masculino no se debe quebrar.  Además los hombres también necesitan ese balance porque sin su esposa Stein se muere en Cuba lejos de la felicidad que encontró en Villamar.  Ella desarrolló su voz con la ayuda de Stein, y un mal hombre destruyó esa habilidad.  Contrario a la teoría de Pratt, ella descubrió sus habilidades a través de un hombre, y de acuerdo con su teoría, las pierde por un hombre.                    

           

Works Cited

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Campbell, Joseph.  The Hero with a Thousand Faces.  Bolingen.  1972

Cantos Casenave, Marieta. “Los relatos de Fernán Caballero entre costumbrismo y realismo”  Siglo Diecinueve 2 (1996): 187-200.

Cáseda Teresa, Jesús.  “Costumbrismo y estética literaria de Fernán Caballero”   Cuadernos de Investigacion Filologica 13 (1987): 69-82.

Fernández-Medina, Nicolás. “Tauromachy and the Bull: What Remains in a Symbol in Fernán Caballero’s La gaviota.” Bulletin of Hispanic Studies. 86 (2009): 401–416.

Herrero, Javier.  “La morada del padre: Pasión y límite en La gaviota.”  Siglo Diecinueve 2 (1996): 175-85.

Johnson, Roberta. “La Gaviota and Romantic Irony” Cultural Interactions in the Romantic Age: Critical Essays in Comparative Literature   Ed. Gregory Maertz. New York:  State U of New York P, 1998. 79-92.

Kirkpatrick, Susan.  “On the Threshold of the Realist Novel: Gender and Genre in La gaviota  PMLA 98.3 (1983): 323-40.

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Pratt, Anis.  Archetypal Patterns in Women’s Fiction.  Bloomington, IU Press, 1981. 

Qualia, Charles B. “La gaviota One Hundred Years After.” Hispania. 1 (1951): 63-67.

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