ANÁLISIS
DEL POEMA EL AZUL ES EL VERDE QUE SE ALEJA... DEL LIBRO SONETOS, 1937
Francisco Javier Ponce Martínez
Universidad de Guadalajara
El segundo poema que
decidimos analizar es uno de los más vanguardistas para su época y que está a la altura
de cualquiera de los escritos por Novo o Villaurrutia. De tal manera nos fijamos en un
texto de estructura superficialmente clásica: un soneto endecasílabo de rima consonante
que maneja términos en apariencia fáciles ¾no se necesita ningún
diccionario para entenderlos. El soneto conocido como "El azul es el verde que se
aleja...", pertenece a uno de los primeros libros, el quinto para ser más preciso[1],
publicados por Nandino, el cual data de 1937; es decir, catorce años anterior a 1950:
I[2]
1
El azul es el verde que se aleja
2
¾verde color que mi
trigal tenía¾,
3
azul de un verde preso en lejanía
4
con que tu fuga construyó su reja.
5
Inmensidad azul, donde mi queja
6
tiende su mudo vuelo de agonía,
7
para buscar el verde que tenía,
8
verde en azul, allá donde se aleja...
9
Mi angustia, en horizontes libertada,
10
corporiza en tu azul de transparencia
11
el verde que persigue la mirada;
12
y en el color que brota de la esencia
13
de gozarte en un ritmo de llegada:
14
yo sufro la presencia de tu ausencia.
EL SIGNIFICADO ES EL SIGNIFICANTE QUE SE ALEJA
Comencemos con la primera estrofa:
1
El azul es el verde que se aleja
2
¾verde color que mi
trigal tenía¾,
3
azul de un verde preso en lejanía
4
con que tu fuga construyó su reja.
Si leemos solamente estos versos, por supuesto que no entendemos casi nada. De
acuerdo con la tradición del modernismo, el azul representa lo poético, lo bello es
azul; pero aquí no parece funcionar así. El verde está asociado con el color que el
trigal tenía. Hasta esta primera estrofa únicamente podemos observar una no muy clara
oposición entre azul/presente y verde/pasado, y entre estos se presenta una reja
construida por la fuga del verde. Notamos, además, que en el último verso existe una
paradoja: la fuga, asociada tradicionalmente con la libertad, en este caso connota lo
contrario: la prisión. Desde el principio nos damos cuenta que los significados se
desprenden de sus significantes usuales para establecer una nueva serie de relaciones
semánticas alejadas de la tradición literaria, y es precisamente allí donde estriba la
complejidad del poema.
5
Inmensidad azul, donde mi queja
6
tiende su mudo vuelo de agonía,
7
para buscar el verde que tenía,
8
verde en azul, allá donde se aleja...
En esta estrofa es más claro el sentido que van adquiriendo las palabras. Tratando
de establecer un paralelismo de los significados con los elementos de la lógica, podemos
hacer la siguiente gradación en cuanto al cambio de expresión de los elementos:
tradicionalmente "A" es igual a "A1", pero en el poema "A"
no es igual a "A1", "A es diferente de "A1" porque "A"
es lo contrario de "A1"; pero la duda continúa, ¿qué es "A1"?
Hasta esta segunda estrofa es una respuesta difícil de explicar. El poema forma
parte de un todo y significa sólo en cuanto a él. Sólo podemos recalcar que existe una
oposición entre dos elementos: verde y azul, y que cada uno de ellos continúa
adquiriendo connotaciones. Así, intentamos clasificar los colores de acuerdo a los rasgos
semánticos que se van asociando a ellos y decidimos agruparlos de esta manera:
Azul [presente] es preso inmensidad mi queja tiende su mudo vuelo de agonía buscar |
Construyó su reja |
Verde [pasado] verde que se aleja mi trigal tenía tu fuga verde que tenía se aleja... |
Analizando el esquema podemos percibir cómo aquí se invierten los valores
simbólicos tradicionales. El azul toma los siguientes rasgos distintivos: es el presente, está preso, es una inmensidad, en él mi queja tiende su mudo vuelo de agonía y trata de
buscar el verde que tenía. En cambio, el
verde adquiere los siguientes rasgos: se aleja,
está en el pasado porque es el color que mi trigal tenía, es un color deseado, con la fuga del verde se construyó una reja entre los dos
colores y, finalmente, cada vez se aleja más.
Con lo anterior podemos concluir que el azul se connota como un elemento negativo y el
verde como uno positivo.
9
Mi angustia, en horizontes libertada,
10
corporiza en tu azul de transparencia
11
el verde que persigue la mirada;
Hemos llegado al clímax del poema. De acuerdo con las nuevas claves de lectura
ahora podríamos hacer una paráfrasis de esta estrofa, la cual podría quedar así: Mi
angustia (presente), en horizontes (el pasado) libertada, corporiza el verde (pasado) que
persigue la mirada en tu azul (presente) de transparencia. Ahora nos es más fácil la
lectura, pero para llegar a ella tuvimos que, como dice Gloria Velázquez, "descifrar
otros lenguajes". El poema habla un pasado añorado que se aleja cada vez más y de
lo imposible que es llegar a él. Como podemos darnos cuenta, el tema es sumamente
sencillo; pero esto no es lo importante ya que en poesía lo valioso es cómo se escribe
el poema.
12
y en el color que brota de la esencia
13
de gozarte en un ritmo de llegada:
14
yo sufro la presencia de tu ausencia.
Complejo hasta el final, el soneto concluye con dos paradojas. En la primera el
"yo" del poema, al evocar el pasado, se encuentra en un estado de gozo y
sufrimiento al mismo tiempo: gozo por corporizar los recuerdos en el presente y
sufrimiento por estar consciente de que el pasado está en la lejanía. La segunda
corresponde al verso yo sufro la presencia de tu
ausencia: el yo del poema sufre por la ausencia del tú, diríamos más fácilmente, pero lo sufre,
aunque pudiera parecer una paradoja, a través de su presencia. En un sentido estricto
podemos decir que esta aseveración es completamente válida, pero nadie en el lenguaje
coloquial lo diría así. Esto significa que el poema usa elementos de la lengua común,
pero los reorganiza para estructurar una mayor complejidad significativa.
Creemos pertinente agregar que ese tú no
corresponde a un personaje femenino, como algunos lectores pudieran pensar, sino al
desdoblamiento interior del protagonista: yo es el presente; tú, el pasado. Es como si el
protagonista pudiera contemplarse a sí mismo en una cámara del tiempo y, de tal modo,
observar todos los hechos de su pasado y sentirlos en el presente, pero sabiéndolos lejos
de su alcance.
Como pudimos ver, el poema "El azul es el verde que se aleja..." se
presenta en primera instancia como si fuera de una construcción tradicional (soneto
endecasílabo de rima consonante, etc.), pero al analizarlo con más detenimiento podemos
darnos cuenta de que es mucho más complejo que la apariencia. A conceptos aceptados por
la convención literaria (el azul, por ejemplo), se le asignan diferentes rasgos
semánticos de los que ya tenían para, finalmente, crear un significante con sentidos
novedosos. En el proceso del cambio de significados, el lector necesita hacer un esfuerzo
para poder comprender el texto en su complejidad.